Desde el pasado viernes día
27 de enero hasta el día 5 de febrero se está
celebrando en Sevilla, la Muestra Nacional de Artesanía
Cofrade (MUNARCO).
La presente edición, coincidiendo
con su décimo aniversario, se celebra repartida entre
la Catedral, los Reales Alcázares y la Casa de la Provincia.
La muestra que intenta difundir
el patrimonio artístico e histórico de la Semana
Santa; donde se concentran orfebres, imagineros, tallistas,
artesanos, etc. Estando todo ello aderezado con las actuaciones
en directo de bandas de música llegadas de toda la
geografía española.
En los Reales Alcázares se
pueden ver las novedades que próximamente estrenarán
las hermandades sevillanas. El interior del templo catedralicio
acoge la exposición de una serie de pasos de distintas
ciudades españolas. Entre las representadas se encuentran
Murcia y Valladolid. También podemos ver el paso del
Santísimo Cristo de la Misión, del sevillano
barrio de Heliópolis, y el paso de palio de Ntra. Sra.
de la Aurora de la Hermandad de la Resurrección. Por
último, la Casa de la Provincia, ha sido el lugar elegido
para que los orfebres y artesanos ligados por su trabajo al
mundo cofrade muestren sus trabajos. A la entrada de esta
sede nos encontramos de frente con el paso de palio de Ntra.
Sra. de la Soledad Coronada de Alcalá del Río,
Sevilla.
Pero cada vez es más visible
la decadencia que viene arrastrando la exposición desde
que dejó el palacio de congresos y exposiciones de
Sevilla; donde se encontraba todo junto en un pabellón,
se aprovechaba su auditorio para los conciertos, etc. El año
pasado en las antiguas atarazanas, se notó algo decaída,
pero este año, a sido algo peor, sobretodo en organización.
Ese aroma a incienso que se respira
en la muestra, junto con los sones de las bandas que ponen
su contrapunto musical actuando en la plaza del Triunfo, hace
recordar que nos encontramos en los prolegómenos de
la Semana Santa.
Digna de todo encomio ha sido y
está siendo la labor desarrollada por el arzobispado
sevillano, quien con su entendimiento del mundo cofrade y
su total unión mostrada con las hermandades de la ciudad
ha desembocado en que sea posible la celebración de
la X Edición de MUNARCO.
Pienso que los sevillanos son afortunados
de tener el arzobispado que tienen y que el ejemplo dado por
este debería cundir entre el resto de los arzobispados
de Andalucía