RAFAEL PÉREZ
CASTILLO, NOS DIBUJA CON SU BUEN ESTILO DE ESCRIBIR EL “LUNES
SANTO EN AYAMONTE. MENTALIDAD IMPORTANTE”
Ángel León / Rafael Pérez Castillo
DonaldPress
Ayamonte, abril 2009
Y
vamos pasando las hojas de ese “programa” imaginario,
pero que verdaderamente se hace en todas las Semanas Santas,
para ayudarnos a situarnos en los lugares y a las horas más
o menos exactas, según que programas, porque en esto
es como en todo, hay algunos programas que están mal
calculados los horarios…
Pero apostaría
que si nuestro entrañable amigo y escritor Rafael Pérez
Castillo, tuviera que hacer un programa de cofradías,
lo haría con toda precisión y lujos de detalles
que, es a lo que nos tiene acostumbrados, cada vez que ha
dado un pregón o exaltación ya haya sido de:
Romería, Gloria o Pasión, ha logrado transmitir
y llegar al corazón de la audiencia más exigente.
Para muestra sobra un botón,
mejor dicho este cuarto artículo que, como cada semana
nada más que hay que leer, estas entregas tan maravillosas,
para conocer, saber y me atrevería a decir y aprender
de cómo hay que vivir la Semana Santa en Ayamonte,
de la mano de nuestro buen amigo Rafael.
Hoy nos va hablar de el Lunes Santo,
ayamontino, es decir de la Hermandad de Ntro. Padre Jesús
Cautivo, Stmo. Cristo de la Buena Muerte y María Santísima
del Rosario que, salen del Templo de las Mercedes. Según
Rafael, “Mentalidad Importante”, si lo leen, comprenderán
posiblemente el porque.
LUNES SANTO, MENTALIDAD IMPORTANTE
Todos los teoremas del Amor tienen,
a partir del Domingo de Ramos, sus enunciados escritos por entre
las calles de Ayamonte. La primera pincelada del Diario de la Pasión
del Redentor se cerró anoche con la firma cansada de muchas
“promesas”. Pueden pensar más, porque las hubo.
El Lunes Santo
dibuja una página de esas que luego son perfectas para
los archivos de siempre, los que visten de añejo al
papel de la Historia respetando escrupulosamente todos los
contenidos.
Cuando finalizaba el año
1971, un movimiento de jóvenes cofrades inquietos y
vivos en la fe de Ayamonte gestan la idea de fundar una nueva
Cofradía. El Lunes Santo estaba disponible en cuanto
a desfiles y la Hermandad del Santo Entierro de la Parroquia
de las Angustias estaba dispuesta a ceder, bajo un control
de amistad y respeto cofradiero, al Cristo de la Buena Muerte
que, con sede en el Templo de las Mercedes, había sido
imagen que procesionara junto al Santo Entierro.
Aquella idea y aquel gesto
hicieron un maridaje de perfección inigualable, y de
ahí brota, para esplendor de la Semana Santa ayamontina
y para gloria de nuestras creencias y su forma de practicarlas,
la Real Hermandad de Jesús Cautivo, Cristo de la Buena
Muerte y María Santísima del Rosario.
Su nacimiento y su crecer fueron
veloces. En 1972, llega la Virgen del Rosario, obra del escultor
ayamontino Antonio León Ortega y en 1973, y también
del mismo autor, la Hermandad se completa con la imagen de Jesús
Cautivo. Estas dos imágenes se unen al Cristo de la Buena
Muerte cuyo autor no es conocido, aunque se le asocia a una prestigiosa
escuela andaluza y se le enmarca en el siglo XVI.
Y empieza el caminar sabio y de
mentalidad importante. Esta joven Hermandad es un revulsivo inquieto
que mueve el poso de tradición, fe y cultura que se adormece
en el tejido semanasantero de Ayamonte, y pone en movimiento un
nuevo sentir cofrade que afecta a todo el engranaje de las Hermandades
y Cofradías. En ella tienen su origen las Casas de Hermandades
y, con objetivos absolutamente de servicio social, comienza a construir
su pirámide de obras y acciones que tocan todos los planos
y llegan a todas las necesidades. Una obra de apostolado –
hasta hoy ininterrumpida – se deja sentir en los más
pobres y necesitados. Son muchas las familias que precisan de un
apoyo alimentario, de cuidado y, sobre todo, de cariño. Todo
esto lo ofrece esta joven Hermandad, dando así sentido, a
su razón de funcionamiento y existencia. La Casa de Hermandad,
se ha de abrir al ayamontino como sede, como museo, como oficina,
pero sobre todo se abre como Guardería Infantil que viene
a solucionar el grave problema de atención a la familia trabajadora
y que pone en activo un puesto de trabajo. Han pasado bastantes
años hasta que, desde otras instancias, se ha empezado a
actuar sobre estas necesidades. Entre tanto se han jugado importantes
bazas, como consecuencia de una gran organización y reparto
de atribuciones: la fundación de la Agrupación Musical
“Cristo de la Buena Muerte” es su más significativo
exponente de dedicación y entrega y, a su sombra, como vivero
para una juventud con tiempo vacío, la Banda Infantil “Jesús
Cautivo”.
Escribir sobre la vocación
cofrade de estas personas que han sido capaces de convertirse en
empresarios de la fe y la caridad, sería cuestión
de un tratado, razón por la que se deja así enumerado
un esbozo de sus líneas maestras, abriendo de esta forma
las puertas a quienes quieran profundizar en el tema, y pasamos
a lo que es la Cofradía en la calle, y a una breve foto de
sus tres magníficos pasos.
El Lunes Santo tiene el aroma salobre
de la retama en flor. La primavera viene empujando y todo el sol
es para la Pasión y Muerte del Redentor. Ahí está
ese Cautivo que, por dificultades ofrecidas por la puerta del Templo,
es obligado a efectuar maniatado una ascensión anticipada,
con lo cual, los ojos de quienes esperan expectantes, se llenan
de Cristo subiendo desde debajo de las trabajaderas de su paso.
Igualmente al Cristo de la Buena Muerte se tumba sobre el césped
de claveles en actitud de divino cadáver que quiere anunciar
su próximo entierro, para cobrar verticalidad en el marco
fervoroso de la calle Jovellanos.
Ya un día, tan arriesgada maniobra
produjo un accidente que originó la suspensión de
la salida, cuando la mandíbula del señor tropezó
con el marco de la puerta y se desprendió su cara. Y también
María del Rosario pliega su palio de oro en mallas y, con
toda la cera apagada, sale andando entre sus costaleros. Y, en la
puerta, dará la impresión de que se le está
construyendo el palio, y de que las velas necesitaban de la brisa
del río para arder.
Tiene esta Hermandad datos muy altos
de la participación de “hermanos” en el desfile.
Las dos hileras de penitentes sin capa, que llevan túnica
negra, antifaz blanco y ancho cinturón de esparto, siguen
siendo muy largas y en ediciones pasadas fueron un auténtico
récord.
La hora de este lunes es lejana
aún para la Hermandad, pero los “hermanos” se
juntan en comunión y, en una Eucaristía que se mete
sola dentro del cuerpo, que se rompe en capítulos de episodios
íntimos, el cofrade y Dios se funden en un abrazo. ¡Ahora,
vamos a la calle!
El día se sobrepondrá
al drama de la Cruz y brillará con un contento inexplicable
tras su despedida en el crepúsculo de la tarde. Pasará
la Cofradía por su Casa de Hermandad y por la Plaza que se
llama “del Rosario”, en honor a su Virgen, a las puertas
de la Casa de la Cultura – Casa Grande de Ayamonte –
y llegará a su Templo. Antes, en un tramo último de,
no sé cuantos muy pocos metros, desde donde empieza la calle
Felipe Hidalgo ofreciendo una angostura de las de decir “por
aquí no cabe”, y donde los penitentes miran al revés,
y el pueblo camina apretado y de espaldas, se vive una de las estampas
con más colorido de la Semana Santa de Ayamonte. Si vas a
Ayamonte y no ves al Cautivo, al Cristo de la Buena Muerte y a la
Virgen del Rosario, en su subida por “Felipe Hidalgo”,
no sabrás que es dolerte con Jesús y su Madre en el
camino de esta noche, y no me vengas diciendo que has visto Semana
Santa en Ayamonte.
Mercedario Convento,
Templo de las Mercedes. Ya no existe su viejo suelo de madera. Gracias
al Cristo de la Buena Muerte, que puso a sus penitentes un cirio
de empuje en las manos y, en la vocación cofradiera, les
dio trabajo.
Rafael Pérez Castillo(23-03-09)
Que más podemos esperar queridos
amigos del Lunes Santo en Ayamonte, después de leer estas
cosas tan hermosas que nos deberían de servir de ejemplo
para todas las personas que pertenecemos a las hermandades y cofradías:
practicar primero la caridad humana, después quedarán
el ser: costalero, acolito, músico, capataz, etc… Pero
primero la CARIDAD – en mayúsculas-.
En honor a la verdad tenemos que
decir públicamente que son cientos de miles y miles de personas
quienes solemos leer estos artículos tan maravillosos y he
de decirlo públicamente que nos llegan felicitaciones, por
la modesta parte que a mi me corresponde gracias y felicitar a nuestro
entrañable amigo Rafael Pérez Castillo por: su valiosa
colaboración, por sus libros, por sus pregones y no sería
justo, si no comentara también de forma muy discreta, por
las “benditas ramas que al tronco salen”, el sabe por
quien lo digo. Enhorabuena amigo Rafael.
Y nada más amigos que ya estamos
en capilla, “Ya huele a Semana Santa”
Feliz Semana Grande a todos y Feliz Pascua de Resurrección.
Seguiremos informando.
Ángel León/DonaldPress
“Los ojos dicen las verdades
que las palabras esconden”...dedicado a TI.