Cofradía
de la Santa Vera Cruz
Alhaurín el Grande, abril 2011
Como
viene siendo
ya tradicional
en nuestra
Real y Venerable
Cofradía,
el quinto
domingo de
cuaresma,
el Domingo
de Pasión,
es el elegido
para realizar
los actos
en honor
de nuestra
sagrada titular
María
Santísima
de la Soledad.
Fue una
mujer
la elegida
por Dios
para llevar
en sus
entrañas
a su Hijo,
para que
lo guiara
y le diese
todo el cariño
que solo
una madre
puede dar,
y mujeres
las que en
la tarde
del Domingo
de Pasión
fueron las
protagonistas.
La
Vocalía
de culto y formación,
quiso rendir un
pequeño
homenaje a las
que en estos cincuenta
años de
representaciones
en vivo han representado
uno de los papeles
más importantes
de nuestra Semana
Santa, la Virgen
María. Llevaron
hasta el altar
el pañuelo
que portaron entre
sus manos, el que
secó sus
lágrimas,
el que esconde
sus plegarias,
un puñal
de plata, flores
y una foto de una
de ellas, inmortalizando
ese momento tan
importante para
todas, en el que
como hermanas de
arriba representaron
a la mujer más
importante para
los cristianos.
En el ofertorio,
se hizo patente
la generosidad
de la familia Serón,
que fue la que
hizo posible que
nuestra actual
Virgen de la Soledad
esté entre
nosotros, y se
hizo mención
a otra gran mujer,
que además
de una gran trabajadora
es generosa con
nuestra Cofradía,
Doña Clara
Leiva Bravo, quien
regaló un
frontal para la
mesa de altar que
lució esplendoroso
en nuestra ermita
del Convento, perfectamente
adornada por los
albaceas de esta
Cofradía.
Al finalizar la
Eucaristía
y antes de dar
paso al besamanos
de María
Santísima
de la Soledad y
el besapiés
del Santo Sepulcro,
tuvo lugar la bendición
de cinco nuevas
túnicas
de nazareno, realizadas
por las manos de
las mujeres del
taller de bordado
de la Cofradía
, de cuatro escapularios
bordados por Doña
María Bravo,
y de una nueva
Cruz Guía,
tallada en caoba
y oro donada por
el matrimonio Torres
Bravo, los cuales
recibieron el Título
de Familia Cofrade,
en agradecimiento
por todo lo que
a lo largo de sus
vidas han dado
a nuestra cofradía,
por ser su casa
un punto de encuentro
para todo aquel
que se sienta Hermano
de Arriba y por
haber educado a
sus hijos y nietos
en el amor y la
devoción
a nuestro Señor
del Convento, gran
muestra de ello
su hija, Mari Carmen
Torres Bravo, pregonera
2011 que nos hizo
vibrar de emoción
con sus palabras,
a quien se dirigió la
Vocal de Protocolo,
Iraida Velasco,
que agradeció a
la pregonera todo
lo bueno que nos
hizo sentir. Sin
duda, un ejemplo
de familia de hermanos
de arriba a quienes
esta Cofradía
quiso rendir un
merecido homenaje.
Así pusimos
punto y seguido
a este fin de semana
cofrade, punto
y seguido porque
aun nos queda mucho
por vivir en nuestra
semana grande y
en nuestro cercano
día grande,
sólo pedirle
a María
Santísima
de la Soledad que
sigamos sintiéndonos
tan llenos de esperanza
y satisfacción
como nos hemos
sentido en estas
jornadas.