TRES AÑOS DESDE
QUE HUELVA CORONARA A LA VIRGEN DE LA VICTORIA
José María
García Damota
Á rea de Prensa
Hermandad de la Victoria
Huelva, 6 de mayo de 2015
La
Coronación
también se celebra cada día a 6500 kilómetros
de nosotros y sigue viva gracias a la obra social que en
la Republica Dominicana realizó y sostiene esta
Hermandad
“María, nuestra Reina, está de pie,
a la derecha de Cristo, enjoyada con oro, vestida de perlas
y brocado”.
Con esta antífona, y tras el rezo del Santo Rosario,
comenzaba ayer 5 de mayo –martes de la V semana de
Pascua en la que nos encontramos– en la Parroquia
del Sagrado Corazón de Jesús la Solemne Función
Conmemorativa de la Coronación Canónica de
la Virgen de la Victoria presidida por el Ilmo. Sr. D.
Manuel Jesús Carrasco Terriza, capellán del
Monasterio de Santa María de Gracia, canónigo
del Cabildo de la Santa Iglesia Catedral de Huelva y secretario-canciller
de la diócesis.
Durante la Eucaristía, se pidió, entre otros,
por los pobres y necesitados, muy especialmente por las
mujeres marginadas por la prostitución de la Republica
Dominicana, para que en la Obra Social de la Coronación
Canónica, el Taller de Formación Profesional
Virgen de la Victoria de San Francisco de Macorís,
y con el apoyo de las Hermanas Adoratrices, sigan encontrando
la ayuda para que puedan salir de su situación y
vivir con dignidad.
Entre los invitados, se encontraban las Hermanas Teresianas,
Madrinas de la Coronación Canónica y Camaristas
Honorarias de la Santísima Virgen, el Subdelegado
del Gobierno en la Ciudad acompañado de su esposa,
los coordinadores de los actos y cultos de la Coronación
y de la Obra Social respectivamente, así como el
hermano mayor de la Hermandad de la Purísima Concepción
y Triunfo de Cristo, y el presidente de la junta gestora
de la Hermandad de las Tres Caídas, entre otros.
Desde que se abrieron las puertas de la parroquia, muchos
fueron los Hermanos y fieles devotos que acudieron a su
encuentro con la Victoria en un día tan especial.
Muchos fueron los momentos de emoción a sus plantas
con los que iban a dejarle sus ofrendas, sus oraciones,
sus súplicas…
Tras el canto de la salve a la Santísima Virgen
por parte de todos los fieles congregados y concluida la
celebración, el Hermano Mayor hizo entrega al Coordinador
de la Obra Social de la cantidad que desde 2012 la corporación
se comprometió a destinar cada año para el
sostenimiento de la misma tras su construcción y
acondicionamiento, la mayor partida anual de la Hermandad
en obras de caridad y asistencia social. “La mejor
corona somos nosotros mismos, cuando unidos en el amor
mutuo y solidario estrechamos los lazos de nuestra fraternidad
y nos comprometemos seriamente en la ayuda generosa y constante
al hermano que sufre y está necesitado”.
Finalizado el acto, se dejó paso al gran número
de Hermanos y fieles que se reunieron en torno a la Virgen
de la Victoria para contemplarla de cerca y realizar sus
fotografías.
Para la ocasión, la Santísima Virgen de
la Victoria, lucía manto de damasco celeste así como
la toca de sobremanto bordada en oro y sedas estrenada
en 1997. Asimismo, revestía su talle con la saya
de Esperanza Elena Caro de 1954, bordada –bajo un
diseño propio– sobre tisú de plata
a base de oro y sedas, y el fajín del General de
la Guardia Civil –Hermana Honoraria de la corporación–D.
José Antonio Hurtado Notario se anudaba con una
delicadeza suprema en su cintura. Su divina faz se enmarcaba
en un tocado de blonda de tul bordado grisáceo,
el cual imprimía un brillo singular al semblante
de la Madre de Dios. Entre otras joyas –como la Medalla
de la Hermandad de Nuestra Señora de la Cinta–,
lucia sobre su pecho la Medalla de Oro de la Ciudad y el
emblema de oro de la Coronación, y sobre sus sienes
la corona de oro y brillantes de la Coronación Canónica
realizada por Joyería Manuel Valera –única
corona de oro de joyería con la de la Virgen de
la Cinta–, la que donara el pueblo de Huelva para
sellar su amor por siempre jamás a María
Santísima de la Victoria y que en su relicario guarda
parte del velo de la Virgen María.
Intervino el Coro de la Familia Teresiana de Huelva. OBRA
SOCIAL DE LA CORONACIÓN CANÓNICA
La Congregación Religiosa Internacional de las Adoratrices
Esclavas del Santísimo Sacramento y de la Caridad
es una entidad ligada a la historia de esta Hermandad desde
que tras el anuncio de la Coronación Canónica
de la Santísima Virgen de la Victoria en 2008 la
corporación decidiera realizar la obra social que
acompañara a la misma en San Francisco de Macorís
(República Dominicana) para dar apoyo a la labor
digna de elogio y apoyo que allí realizan las religiosas.
El Taller de Formación Profesional Ocupacional
Virgen de la Victoria (especialidad en repostería
industrial) es desde su nacimiento y hoy por hoy la más
hermosa joya que brilla cada día en la corona de
la Santísima Virgen, aun encontrándose a
6.500 kilómetros de nosotros. Gracias a su construcción
y acondicionamiento, la Hermandad de la Victoria ha permitido
que anualmente 50 jóvenes marginadas por la prostitución
y los malos tratos aprendan un oficio con titulación
oficial expedida por el Gobierno de la Republica Dominicana
a través de INFOTEP (Instituto Nacional de Formación
Técnico Profesional), el cual las capacita para
el ejercicio de una profesión y para ganarse el
sustento de su vida. Estas jóvenes forman parte
de un programa asistencial, de capacitación y formación
integral que realizan las Adoratrices en San Francisco
de Macorís, el cual pretende capacitar laboral y
socialmente a un grupo numeroso de mujeres en esta situación.
El programa incluye las áreas de formación
académica y profesional, salud, atención
a la familia, alimentación y vivienda.
La Hermandad de la Victoria realizó esta buena
obra en 2012 y se comprometió a seguir sosteniendo
el proyecto - el cual abre tantas posibilidades de promoción
a unas mujeres que desde entonces sentimos tan próximas
a nosotros- destinando anualmente al mismo su mayor partida
en obras de caridad y asistencia social. La mejor corona
somos nosotros mismos, cuando unidos en el amor mutuo y
solidario estrechamos los lazos de nuestra fraternidad
y nos comprometemos seriamente en la ayuda generosa y constante
al hermano que sufre y está necesitado.
Los Hermanos de la Hermandad de la Victoria subrayan su
orgullo por el hecho de que su corporación haya
contribuido, contribuya y siga contribuyendo con la construcción
y el mantenimiento de la obra social de la Coronación
Canónica de María Santísima de la
Victoria al buen hacer de las Hermanas Adoratrices en el
tercer mundo.