Fiestas
Patronales de Béznar 2005
Un año más nos hemos encontrado
inmersos en las fiestas que, como cada mes de septiembre, celebra
el pueblo de Béznar en honor a su patrón San Antón.
Llegamos el sábado tres de septiembre,
cuando el Cabo de los Mosqueteros acompañado, como desde
hace dieciocho años, por la Agrupación Musical Virgen
del Carmen de la localidad de Dúrcal dirigida por Manolo
Bocao, se encaminaba al barrio de Los Peloteos para, a golpe de
mosquete y marchas musicales, sacar de su sopor a los habitantes
de la barriada e invitarles a unirse a la fiesta.
Siguió un recorrido por la casi totalidad
de las calles de Béznar en el que, como reza la tradición,
se va recogiendo en sus domicilio a todos y cada uno de los mosqueteros,
así como a los alguaciles.
Todos formados en la calle principal, antigua
carretera que unía Granada con Motril, recibieron con una
atronadora salva de mosquetes la salida de San Antón desde
la iglesia a la plaza donde le esperaba una multitud de fieles
y curiosos. También estuvieron allí, como en el
resto de los actos programados, la Reina de las Fiestas y sus
damas de honor.
Posteriormente los Alguaciles rindieron honores
al santo y uno de ellos tremoló la bandera al ritmo lento
y sosegado de un vals.
Después la comitiva se dirigió en
procesión desde la plaza de la iglesia al barrio de Los
Peloteos. Un ensordecedor estruendo y un intensísimo olor
a pólvora quemada provocados por los continuos disparos
llenó el ambiente hasta el momento de la vuelta a la iglesia.
Nos volvimos a encontrar con algunos amigos, entre
los que nos complace contar con el Cabo de los Mosqueteros, Juan
José Gijón, con el que pudimos charlar durante pocos
minutos ya que sus obligaciones como máximo responsable
de los mosqueteros le obligaba a ir de acá para allá
sin un minito de tregua. También nos encontramos con Iván
Ríos Morillas, el chavalillo que contaba seis años
cuando la foto que le hice en 2003 fue portada de la revista La
Voz del Valle de Lecrín. Hoy ya con ocho años es
un mozalbete que desea seguir formando parte de la tropa de mosqueteros.
La seguridad estuvo garantizada por un grupo de
voluntarios de la Agrupación Local de Protección
Civil de Dúrcal que, como cada año, asumen el papel
de ángeles guardianes del pueblo de Béznar durante
sus fiestas.
Es curiosa la historia que rodea la existencia
de los mosqueteros, algunos de los cuales aun portan y usan los
que originariamente regaló, como medida de autodefensa,
Don Juan de Austria, armas que pesan alrededor de catorce kilos
y que gracias al cuidado y mimo de sus propietarios, es posible
verlos hoy día como si estuviesen recién salidos
de manos del armero que los fabricó.
Ofrecemos aquí la historia de los mosquetes
tal y como consta escrita en el libro de las fiestas de 2003.
Fotos y Texto: F. Molina
Padul Cofrade, 2005
|