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El Viernes Santo paduleño cuenta ya con un paso de palio

El pasado Viernes Santo, la Muy Antigua e Ilustre Hermandad de Nuestra Señora de los Dolores ha visto cumplirse uno de sus sueños, sacar la imagen de su titular bajo palio.

En una hermosa tarde comenzó su estación de penitencia el la hermandad, única que conozcamos que está íntegramente constituida por mujeres. Sobre un paso dorado de talla barroca se hacía notar un esbelto palio, cuyos doce barales de plata han sido realizados en los talleres de “Aragón Orfebre” de la granadina ciudad de Motril. Un sobrio palio de terciopelo negro con bambalinas doradas remataba el artístico conjunto.

Un valiente cuerpo de costaleras, a las órdenes de la capataz Magdalena Redondo Arias llevo el paso durante la estación de penitencia con una maestría propia de cuadrillas más curtidas en estas lides. Andando por derecho y con paso firme recorrieron las calles de El Padul mostrando a propios y extraños la sagrada imagen de Nuestra Señora de los Dolores a la que ponía los sones la Banda de Música de Güevejar (Granada). Nadie diría viendo andar a esta valerosa cuadrilla de costaleras que este año se le han añadido más de doscientos kilos adicionales al paso.

Muchas son las cosas que poco a poco irán completando el paso de palio (candelería, faroles de cola, flores de cera, bordado del palio, modificación del manto de la virgen o bordado de uno nuevo, etc.). No obstante el reconocido bordador Otilio Durán de Alhendín (Granada), el mismo que bordó el sin pecado de esta hermandad y la “bacalá” del Crucificado, ya ha visto el palio y no se descarta que realice algún proyecto para el bordado del mismo en un futuro que esperamos no sea muy lejano.

Texto: F. Molina
Fotos: Francisco Rejón

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