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Ofrenda
Floral a Ntra. Sra. de las Angustias de Granada
Como
marca la tradición y coincidiendo con la festividad de
la Virgen de las Angustias, se llevó acabo la gran ofrenda
floral que dedica la ciudad de Granada y pueblos vecinos a su
Patrona. Como es usual, en la fachada recién restaurada
de la Basílica se colocaron dos grandes paneles en donde
se iban ubicando los cientos y cientos de ramos que eran entregados
por los granadinos. Una vez mas, fueron los bomberos de la ciudad
los encargados en colocar todas las flores en los paneles, formando
al caer la noche un grandísimo mosaico de colores formado
por flores de todas las clases.
La ofrenda se inició cuando los bomberos colocaron su ramo
de flores junto a la escultura pétrea de la Virgen de las
Angustias, situada en la portada de ingreso a la basílica.
Tras ese emocionante momento, se dio paso a la ofrenda por parte
del pueblo, formando largas colas que en momentos casi alcanzaban
los trescientos metros. Un hecho importante y destacable fue la
decisión del Arzobispo de Granada, monseñor Fernández,
de situarse al frente de la mesa donde se depositaban las ofrendas
y ser el propio arzobispo el encargado de recogerlas y saludar
a todas las personas que por allí pasaban.
Paralelamente, otros colectivos como asociaciones, cofradías,
bandas, coros, etc. también llevaban su ofrenda a la patrona
en forma de música o cante. Así, fueron muchos los
grupos que pasaron por delante de la basílica y ofrecieron
lo mejor de sus repertorios como pudo ser el coro rociero de María
Auxiliadora y el de la hermandad del Rocío de Santa Fe.
El mundo de la música de Semana Santa se vio representa
gracias a la Agrupación Musical Luz Casanova de la Zona
Norte de la capital granadina, que como es ya tradicional partió
desde la Catedral para llegar poco después a la basílica
y allí ofrecerle a la Patrona lo mejor de sus interpretaciones.
También destacable es la restauración del interior
del templo y la nueva iluminación artística del
camarín de la Virgen que fue inaugurada días atrás
que hace que sea aún mas espectacular la contemplación
de María en su quinta angustia.
Texto
y fotos
Andrés Rejón Sánchez |
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