La imagen de Santa Ana que cedió la iglesia de Gójar a la parroquia de Restábal después de que esta sufriera un tremendo incendio en 1965, ha sido devuelta a su templo, tras adquirir Restábal una nueva talla de la santa. La iglesia de Restábal, consagrada a San Cristóbal y anteriormente a Santa María, data del siglo XVI y es una de las más antiguas del Valle de Lecrín. La iglesia de Restábal sufrió otro incendio, esta vez intencionado, cuando se produjo la rebelión de los moriscos en la Navidad de 1568.

     Un vecino de Restábal, Julio Reyes 'El Carpintero' recuerda que eran las cuatro de la madrugada del dos de diciembre de 1965 cuando, sin saber cómo, comenzó a arder la iglesia de Restábal. «Todos salimos a apagar el fuego pero no pudimos sofocarlo. El retablo, coro y artesonado se cayeron a pedazos, las imágenes se desplomaron y se hicieron cenizas. Cuando llegaron los bomberos todo estaba perdido. Una Inmaculada y poco más que se encontraban en la sacristía sobrevivieron al incendio y de la estructura pervivió la torre. Hasta el 12 de octubre de 1966 no se volvió a reinaugurar la iglesia. Mi hermano Miguel y yo, por ejemplo, nos encargamos de la carpintería: artesonado, bancos, puertas, ventanas. Muchas cosas las regalamos. Otras personas y religiosos donaron cuadros e imágenes», señala.

     Según Julio Reyes, la iglesia de Restábal se restauró, principalmente, gracias a las aportaciones económicas de los vecinos de Restábal, El Padul, Lanjarón y Pinos del Valle. Don Andrés, que celebra la liturgia los domingos en Talará, era su párroco. Él se encargó se buscar una nueva imagen de Santa Ana, copatrona de Restábal y la encontró en Gójar. Allí, al parecer, la prestaron a la iglesia de Restábal hasta que el pueblo adquiriese una imagen. Hace poco, don Enrique, el párroco de la localidad, encargó una imagen a un escultor de Guadalajara y le envió la imagen de Santa Ana de Pinos del Valle para que la hiciera igual. El escultor la ha hecho en menos de un año.

     Una vez que la iglesia de Restábal cuenta ya con una nueva imagen de Santa Ana, la primitiva ha sido devuelta a Gójar. Eso sí. A la actual santa le falta comprarle una corona aunque todo llegará. De momento, la talla ha sido sufragada por la iglesia y los vecinos y ha costado algo más de 8.000 euros.