Salvador
Chaves Fajardo
Granada, 7 de junio de 2017
El
pasado sábado, 3 de junio, tenía lugar
en Granada la salida extraordinaria del paso de misterio
de Jesús de la Entrada en Jerusalén con
motivo del centenario de la hechura y bendición
de la Imagen.
Una tarde
magnífica y más veraniega
que primaveral hizo que se disfrutara muchísimo
de esta salida. Y es que a parte de lo extraordinario
de la celebración, el paso de misterio volvió a
salir desde la sede canónica de la cofradía,
la Iglesia de San Andrés Apóstol, tras
haber permanecido cerrada por obras durante los últimos
18 años y que gracias al incansable trabajo
de la cofradía granadina se ha podido acelerar
el trabajo y reabrir el tempo al culto.
A las 6 de
la tarde salía el cortejo del templo,
encabezado musicalmente por la banda de cornetas y
tambores de las Tres Caídas de Granada antecediendo
a la cruz parroquial, a la que seguían representaciones
de la mayoría de las hermandades y cofradías
de la ciudad y algunas de fuera de ella, como el caso
de la Hermandad de la Borriquilla de Padul, que accedió a
la petición formulada por la Cofradía
convocante de acompañarlos en esta importante
jornada y que acudió con su guión corporativo
y varios miembros de su junta de gobierno.
Durante unas
seis horas estuvo el paso en las calles granadinas,
dejándonos estampas magníficas
como su entrada a los Jardines del Triunfo y el paso
por diferentes templos como la Basílica de San
Juan de Dios, el Santuario del Perpetuo Socorro (desde
donde la Cofradía ha salido durante estos últimos
18 años), la Iglesia de los Santos Mártires
Justo y Pastor (sede provisional durante varios años)
y la Iglesia de Santiago (sede de la Parroquia de San
Andrés y lugar donde han recibido culto los
titulares de la cofradía durante los años
en que ha permanecido cerrada su sede).
Cerca
de la medianoche, volvía el paso de misterio a la
iglesia de San Andrés, con los sones de la AM María
Santísima de la Estrella que durante todo el recorrido
interpretaron numerosas composiciones con un nivel musical
magnífico. Se ponía así punto y final
a esta histórica e importante cita con la Hermandad
de la Borriquilla de Granada.