La talla, con gran realismo y expresión, realza la estela de la escuela granadina

El pasado sábado día 20 de agosto tuvo lugar en la Iglesia del Santísimo Sacramento del municipio de Jayena, la bendición de la talla de Nuestra Señora de la Paz, titular mariana de la Cofradía de Nuestro Señor Amarrado a la Columna y Nuestra Señora de la Paz, obra del escultor granadino D. Alberto Olmedo Muñoz. La celebración, presidida por el Párroco D. Pedro López, contó con la asistencia de numerosos fieles y miembros de la cofradía, los cuales arroparon a la nueva imagen en ese día tan importante para toda la comunidad cristiana jayenera. Para la ocasión Ntra. Sra. de la Paz fue vestida con mimo y esmero por D. Cristian Castillo Prados.

La magnífica talla de candelero de Ntra. Sra. de la Paz, con una altura de 1,60 centímetros, ha sido elaborada en madera de cedro de Brasil, con una policromía al óleo mediante veladuras a partir de las técnicas tradicionales de la imaginería andaluza, en concreto, de la escuela granadina. Su creador, con gran profesionalidad, incorpora a la talla ojos verdes de cristal pintados a mano, así como una boca tallada al detalle. Para terminar, Ntra. Sra. de la Paz presenta unas manos que se abren a recibir bajo su cobijo a todos sus fieles.

Por lo que a D. Alberto Olmedo Muñoz se refiere, el mismo se forma en la Escuela de Artes de Granada, donde cursa las especialidades de talla en madera y la de dorado y policromía. A través de la estela del periodo exultante de la Escuela Granadina y tomando como referencia directa las labores encarnadas por Alonso de Mena, Pedro de Mena, Torcuato Ruíz del Peral, José de Mora o José Risueño, D. Alberto Olmedo Muñoz se decide por una imaginería fiel a la naturalista del barroco. Asimismo, apuesta por la superación de los patrones estéticos adocenados y reiterativos y encauza su labor hacia la consecución de un estilo propio e identitario que es compendio de tradición y contemporaneidad. Tras finalizar su formación pronto comienza a realizar trabajos de imaginería, talla, dorado y policromía para particulares, cofradías, conventos e iglesias de toda la geografía española (Jaén, La Coruña, Ourense, Salamanca, Cuenca, Córdoba, Jerez, Málaga, o Granada, entre otros). Entre sus trabajos, podemos destacar, entre otros muchos, la imagen de San Cecilio patrón de Granada por su delicadeza a la hora de sus acabados en dorados y policromados, así como su postura clásica; distintas dolorosas repartidas por toda España para particulares y religiosos, en las que se refleja su manera personal de crear y representar distintos momentos de angustia y dolor sin perder la belleza; la restauración del dorado de la crestería del palio de Ntra. Sra. de la Esperanza de Granada con motivo de su coronación canónica; así como la realización de la cruz procesional del Nazareno de las Penas de la Hermandad del Cristo de San Agustín (Granada), y la Cruz procesional del Nazareno de Pulianas. Su última obra es la talla de Ntra. Sra. de la Paz, la cual es su primera dolorosa de tamaño natural, así como su primera titular para una hermandad. Es por todo lo anterior que D. Alberto Olmedo Muñoz se nos presenta como un artista granadino polifacético, evolutivo y emocional.

Con carácter previo al momento del acto de bendición de la nueva talla, D. José Yeray Socorro, miembro de la Cofradía, expuso las siguientes palabras a todos los asistentes:

“Buenas tardes a todos y todas.

Allá por la década de los setenta, en concreto en el año 1974, en una lluviosa tarde de primavera, llega a Jayena de la mano de D. Antonio Peregrina Jiménez y Dña. María Espadas García, la talla del que años más tarde sería el titular de la Cofradía de Nuestro Señor Amarrado a la Columna, la cual previamente a este hecho procesiona durante años junto al resto de imágenes de nuestro pueblo. Años más tarde, en concreto en el año 1992, nace, debido a la inquietud de un grupo de jóvenes, la que es en la actualidad la Cofradía de Nuestro Señor Amarrado a la Columna, la cual pronto se hace un hueco en la Semana Santa jayenera.

Durante varios años, junto a la creciente devoción hacia el titular de la Cofradía, muchas son las mejoras que se llevan a cabo, todas ellas con el fin de realzar y dignificar cada una de las estaciones de penitencia, sin olvidar nunca el respeto y cuidado hacia la talla del Cristo. Es por ello que en el año 2014 se decide acometer una mejora de la misma a cargo del Escultor D. Alberto Olmedo gracias al cual, con su gran profesionalidad y dedicación, hace posible que hoy veamos a nuestro titular de la forma en que lo hacemos. En esos momentos nace la idea conjunta por parte de D. Alberto y de la Cofradía de contar con una titular mariana, hecho que, tras ser valorado positivamente por ambas partes, origina que se modifique el nombre de nuestra Cofradía incorporando la advocación mariana de Nuestra Señora de la Paz.

Pese a los devenires de los últimos años, y no contentos solo con este cambio de denominación, se decide materializar dicho deseo que en un principio quedó en simples palabras y un boceto de la imagen mariana. Desde un primer momento se tuvo claro, como ya se ha comentado con anterioridad, que tal cometido sería realizado por D. Alberto Olmedo, debido a su profesionalidad y gracias a su implicación con nuestra Cofradía. Con este punto de partida, es a mediados del pasado año cuando se empieza a materializar el encargo, así como a buscar lugar de culto de la nueva talla. Desde un primer momento se contó con el apoyo de Dña. Trinidad Aguado Peregrina, Trini, para que Nuestra Señora de la Paz pudiese ser venerada en la Ermita de San Antonio. Permítanme desde este atril brindar un sentido homenaje a Trini, la cual estamos seguros que allá donde esté estará disfrutando de este día tanto como nosotros.

Pese a que inicialmente el lugar elegido fue dicha Ermita, nuestro nuevo Párroco, D. Miguel, nos sugiere la idea de que nuestra titular sea expuesta al culto en este lugar, es decir, en la Parroquia del Santísimo Sacramento de Jayena, y aquí nos encontramos finalmente, enriqueciendo el patrimonio artístico y devocional de nuestra localidad.

Centrados en la imagen de Nuestra Señora de la Paz la misma es una imagen realizada en madera de cedro de Brasil, policromada al óleo mediante veladuras, siguiendo las técnicas tradicionales de la imaginería andaluza, más concretamente, de la escuela granadina. Presenta ojos de cristal, pintados a mano y boca tallada en su interior, con una altura de un metro sesenta centímetros.

Acabamos no son antes dar las GRACIAS.

GRACIAS en primer lugar a D. Alberto Olmedo por su gran labor y profesionalidad, al cual le deseamos muchos éxitos en su carrera profesional.

GRACIAS a D. Antonio Peregrina y Dña. María Espadas ya que sin ellos nada de esto hubiese podido ser realidad.

GRACIAS a la Cofradía de Nuestro Señor Amarrado a la Columna y Nuestra Señora de la Paz, y en especial a D. Francisco Peregrina Espadas, Paco, por su tesón y gran esfuerzo, ya que tareas como estas son difíciles de alcanzar.

GRACIAS a todas aquellas personas que, aún sin pertenecer a la Cofradía, han apoyado esta causa y se han ofrecido a lograr la misma aportando su ayuda, ayuda que esperamos perdure en el tiempo.

Y por último, y no por ello menos importante, GRACIAS a todas y cada una de las personas que han querido acompañar a la Cofradía de Nuestro Señor Amarrado a la Columna y Nuestra Señora de la Paz en este día tan importante.

Deseamos, por último, que Nuestra Señora de la Paz les acompañe a todos y todas a partir de hoy formando parte de sus plegarias.

Buenas tardes.”

Tras el acto, la imagen de Nuestra Señora de la Paz fue traslada entre aplausos de fieles y devotos a su lugar de culto dentro de la Parroquia, el cual, estamos seguros que será a partir de ahora punto de encuentro de peticiones y oraciones.