El
secreto revelado por la Virgen María
en La Salette, remitido al Papa Pío
IX, el 18 de julio 1851, fue encontrado
recientemente en los archivos del antiguo
Santo Oficio.
Muchos
citan, en particular entre los sedevacantistas
, el secreto dado a Melanie en La Salette
por María según la versión publicada
en 1879 con el imprimatur del obispo Mons. Zola,
de Lecce, Italia. Comentan e interpretan este
texto, reproducido con frecuencia, a menudo con
poca prudencia, juzgándolo hasta hace
poco, conforme con el secreto escrito por Melanie
Calvat el 03 de julio 1851 en el convento de
las Hermanas de la Providencia de Corenc. Pero
si hay que decir, incluso temblando, la verdad,
la cual tiene sus exigencias, diremos que éste
no es el caso: las dos versiones difieren en
puntos importantes, muy en particular acerca
del supuesto «eclipse de la Iglesia».
De hecho, gracias a un reciente descubrimiento
inesperado, hecho en Roma el 02 de octubre
1999, los “secretos” revelados por la Virgen
María en La Salette a los pastores, que fueron enviados al Papa Pío
IX el18 de julio 1851, creyéndose perdidos, se encontraron milagrosamente
en los archivos del antiguo Santo Oficio por el Padre Michel Corteville .
Esta es una noticia maravillosa y muy hermosa para todos los católicos
piadosos que respetan la aparición de La Salette, pero sin embargo
muestra una diferencia innegable entre la versión escrita por Melanie
en 1851 justo después de la aparición, y el texto impreso
y transmitido a partir de 1879.
I. Fondo
El 19
de septiembre de 1846, la víspera de
la fiesta de Nuestra Señora de los Dolores,
mientras miraba a su rebaño con Maximin
Giraud, Melanie Calvat , humilde pastora de Dauphine
vio a la Santísima Madre con lágrimas
en los ojos. La Virgen entregó a los niños
un mensaje destinado a ser publicado, y transmitió a
cada uno de ellos unas palabras personales con
un secreto que no debiera ser revelado sino a
la más
alta autoridad de la Iglesia, es decir, al Santo
Padre. El obispo de Grenoble, entonces, Mons.
Filibert de Bruillard , nombró algunas
comisiones con el encargo de examinar los hechos
y ver si se trataba
efectivamente de un acontecimiento sobrenatural.
Por ello, desde diciembre 1846 tuvieron lugar
varias reuniones de la Primera Comisión.
Una de ellas, que estaba integrada por profesores
del seminario
de Grenoble y canónigos titulares de la
diócesis,
llegó a la conclusión de que eran
necesario nuevos debates antes de formular un
juicio definitivo.
El 19
de septiembre de 1846, Melanie Calvat, humilde
pastora
de Dauphine, vio a la Santísima Madre con
lágrimas en los ojos.
Así fue cómo se constituyó una
nueva comisión de la Iglesia con el fin de
profundizar en el comprensión de los hechos
relatados por los dos pastores, Melanie y Maximino,
que tendría algunas reuniones regulares, desde
julio hasta el mes de septiembre de 1847, encabezada
por dos expertos altamente calificados en el campo
religioso, el Canónigo Orcel , superior del
Seminario Mayor, y el canónigo Rousselot .
Poco después tuvo lugar una reunión
general integrada por diez y seis sacerdotes en la
residencia del Obispo de Grenoble, en su presencia,
en diciembre de 1847, constituida por los vicarios
generales de la diócesis, los párrocos
de Grenoble y los canónigos titulares. Como
resultado de esta Reunión general, y después
de una cuidadosa consideración del informe
presentado por los canónigos Rousselot y Orcel,
la mayoría de los sacerdotes admitió la
autenticidad de la aparición.
«La aparición
de la Santísima Virgen, el 19 de septiembre
1846 en La Salette, tiene enteramente la marca de
la verdad…»
(Mons. Bruillard, obispo
de Grenoble, 10 XI 1851).
II.
Primer borrador del secreto de Mélanie
en 1851
A pesar
de las conclusiones positivas de la diócesis
de Grenoble, el Cardenal de Bonald, Arzobispo
de Lyon , se mostraba escéptico y no ocultaba
sus dudas. El cardenal de Bonald, por ello, exigió que
los niños le confiasen su secreto, con
el argumento, que era algo engañoso, de
que tenía un mandato oficial del Papa.
Los niños accedieron a su petición,
pero Melania, asustada, recordó las exigencias
de la Virgen María, e insistió firmemente
en que su texto, una vez escrito, debería
ser introducido en un sobre sellado y entregado
directamente al Papa. Bajo esta condición
el obispo de Grenoble, envió dos representantes
a Roma, y el texto de los dos secretos privados
se entregó al Papa Pío IX, el 18
de julio 1851.
Esto
produjo un efecto inmediato, ya que Mons. Bruillard,
obispo de Grenoble, fundándose en observaciones
de Mons. Lambruschini Cardenal, Prefecto de
la Sagrada Congregación de Ritos en
Roma, firmó un documento el 18 de septiembre
de 1851, publicado el 10 de noviembre, en el
que declaraba:
“
Creemos que la aparición de la Santísima
Virgen a dos pastores, el 19 de septiembre
de 1846 en la parroquia de La Salette, presenta
enteramente las características de la
verdad, y que los fieles tienen razones para
creerla, verídica y cierta.” (Mons.
Bruillard, obispo de Grenoble, 10 de noviembre
de 1851).
Con todo, en 1854, Mons. Ginoulhiac había
escrito, a causa de las fantasías que
bullían en la mente de Melania que las
predicciones que se atribuyen a Melanie … no
tienen fundamento, carecen de importancia respecto
de los sucesos de La Salette… son posteriores
a estos sucesos y no tienen conexión
con ellos . “El obispo proclamará,
el 19 de septiembre de 1855, en la Santa Montaña: “La
misión de los pastores ha terminado,
ahora comienza la de la Iglesia”.
III. Melanie Calvat:
la vida
Después
de la aparición de septiembre de 1846
en La Salette, Melania entró como pensionista
en el convento de las Hermanas de la Providencia
de Corenc cerca de Grenoble, donde se había
llevado a cabo la primera investigación
sobre los hechos. A la edad de veinte años,
mostrando una piedad ferviente, entró en
la congregación, iniciando su postulantado,
y en octubre de 1851, tomó el velo bajo
el nombre de Sor María de la Cruz. Pero
a raíz de la muerte del obispo Bruillard
en mayo 1853, a comienzos de 1854, sucedió que
su sucesor, se negó a autorizar la profesión
de Melania, al considerar que no estaba suficientemente
madura espiritualmente. Melania protestó,
y declaró que la verdadera razón
de esta negativa era que el obispo, a quien molestaban
las palabras del secreto y el mensaje de la aparición,
trataba de congraciarse con el republicano Napoleón
III, lo cual no era cierto.
Melanie
Calvat En octubre de 1851 tomó el velo
bajo el nombre de Sor María de la Cruz.
a) La simpatía monárquica
de Melania
A raíz de este rechazo injusto, Melania
ingresó en el convento regido por las
Hermanas de la Caridad, sin ocultar en sus declaraciones,
que era víctima de los adversarios de
la Iglesia y que había una conspiración
masónica para destruir a la Francia católica.
En un momento en que Francia se dividía
en republicanos y monárquicos, Melania,
se prestaba a repetir las palabras de la Virgen
María y denunciaba a la masonería,
por lo que ponía en grandes dificultades
a la jerarquía católica, la cual
buscaba un compromiso. Melania profesaba abiertamente
sus simpatías monárquicas, confiriendo
al culto de Nuestra Señora de La Salette
un significado altamente político.
Para evitar la controversia política francesa
Melania, por sugerencia de un prelado inglés,
Monseñor Newsham, fue trasladada al Carmelo
de Darlington, en Inglaterra, a donde llegó en
1855, pronunciando sus primeros votos en 1856.
En 1858, Melania volvió a escribir al
Papa para enviarle la parte del secreto que había
sido autorizada a revelar en ese año,
bien que durante su estancia en Darlington, hablaba
de una serie de acontecimientos extraños
y milagrosos que iban a suceder pronto y que
causarían asombro. El obispo le prohibió hablar
en público acerca de estas profecías.
b) Melania escribe la regla de “Apóstoles
de los últimos tiempos” y la segunda
versión del secreto.
En
Castellammare di Stabia , Italia, Melanie escribió la
Regla de “los hijos de la Orden de la Madre
de Dios” o “apóstoles de los últimos
tiempos”
En 1860, liberada por el Santo Padre de su voto
de permanecer enclaustrada en el Carmelo, y para
poder continuar su misión, regresó al
continente, entrando por indicación de
un jesuita, el padre Calage, en la Congregación
de las Hermanas de la Compasión de Marsella.
Después de muchos avatares, de recalar
en el orfanato de Cefalonia en Grecia, Melania
volvió por breve tiempo a las Hermanas
de la Compasión, y en octubre de 1864
fue admitida como novicia. En el año 1867,
oficialmente deja la orden, tras una breve estancia
en Corps y La Salette, y se va a vivir a Castellammare
di Stabia, cerca de Nápoles, donde el
obispo local, Mons. Petagna, le dio una buena
acogida. Ella vivió allí diecisiete
años, poniendo por escrito el Secreto
con la Regla de la orden de la Madre de Dios
[1].
El libro publicado, en segunda
versión, del secreto escrito en 1879: La Aparición
de la Santísima Virgen en la montaña
de La Salette fue puesto en el Índice por
el Santo Oficio
Aníbal María
Di Francia (1851-1927)
IV.
Secreto redactado por segunda vez y publicado
en 1879
Hacia 1873 Melania
redacta de nuevo el mensaje dado por la Virgen,
con el imprimatur del cardenal
Sisto Riario Sforza , arzobispo de Nápoles
y con la aprobación de Pío IX
. El mensaje fue publicado oficialmente por
Melanie Calvat el 15 de noviembre 1879 y recibió el
imprimatur del obispo Luigi Salvatore Zola
, obispo de Lecce , cerca de Nápoles,
quien en su diócesis había protegido
y ayudado a Melania . El título era:
La Aparición de la Santísima
Virgen en la montaña de La Salette.
Fue después de esta segunda versión
del secreto, cuando comenzó una controversia
histórica, sobre cuál era exactamente
la parte del secreto original, y qué era
lo que se añadió más tarde,
posiblemente, por Melania siguiendo su propia
inspiración.
En
este contexto, en 1880, el obispo de Troyes
denunció al Santo Oficio la obra de
Melanie que ya había recibido el visto
bueno del ordinario de Lecce (imprimatur y
nihil obstat de Mons. Zola, obispo de Lecce,
el 15 de noviembre de 1879 ), con lo que el
cardenal Próspero Caterini , secretario
del Santo Oficio, declaró públicamente: «El
Santo Oficio deplora la publicación
de este libro. Su voluntad expresa es que se
retiren de las manos de los fieles, en la medida
de lo posible, los ejemplares puestos en circulación»:
«Reverendísimo Padre, Su carta
del 23 de julio pasado relativa a la vulgarización
de la obra titulada «La Aparición
de la Santísima Virgen en la Montaña
de La Salette» fue remitida a los Eminentísimos
Padres junto a mis Inquisidores, que han tenido
a bien responder a su paternidad, que no ha
complacido a la Santa Sede el que el opúsculo
antes mencionado fuese facilitado al público
y que por ello, es su voluntad que en la medida
de lo posible los ejemplares se retiren de
las manos de los fieles. Card. Caterini, Roma,
8 de agosto de 1880».
Poco
después, el Vaticano puso el libro en
el Índice. Melania, apesadumbrada y
amargada, se trasladó a Cannes, y después
a Chalons-sur-Saône, con la intención
de crear una comunidad con el patrocinio del
Canónigo de Brandt de Amiens. Cuando
todo iba bien, Melania chocó con Mons.
Perraud , obispo de Autun, a propósito
del legado con que él tenía la
esperanza de ayudar a que la fundación
se constituyera.. Molesta y triste, en 1892,
Melania volvió a Lecce, Italia, desde
donde partió a Messina, en Sicilia,
por invitación de Hannibale di Francia.
Después estuvo unos meses en la región
del Piamonte, en Moncalieri cerca de Turín,
de donde partió para instalarse en el
Allier, invitada por el abad Gilbert Combe,
pastor de la Diou donde ella completó su
autobiografía. En 1901 el P. Combe publicó su
versión del prohibido secreto de Melanie
con el título: «El gran golpe
con su fecha probable». [2]
Melania al poco se indispuso con el P. Combe
acusándole de querer arrebatarle los
secretos que eran su vida, y una vez más
visitó la Santa Montaña de La
Salette, antes de volver más tarde a
Altamura, cerca de Bari, en el sur Italia,
donde murió el14 de diciembre 1904.
Sus restos se encuentran enterrados al pie
de una columna de mármol con un bajorrelieve
de la Virgen María en el Cielo dando
la bienvenida a la pastora de La Salette. A
lo largo de su vida tan difícil y problemática,
Melania Calvat, se mantuvo siempre fiel a su
testimonio original.
V. Texto auténtico del secreto
de La Salette en 1851 escrito por Melania
Fue así como la controversia surgida a partir de
las dos redacciones del secreto de Melania, separadas por
más de veinticinco años de distancia, continuó dividiendo
a los católicos durante décadas, sin que
nadie pudiera confirmar, o negar, la verdad de las declaraciones
de la vidente de La Salette. Pero hace muy poco, un evento,
inesperado y extraordinario, llegó a arrojar nueva
luz sobre este debate, ya que al realizar sus investigaciones
en Roma el 02 de octubre 1999, el P.Michel Corteville encontró milagrosamente
en los archivos del antiguo Santo Oficio, las cartas enviadas
al papa Pío IX el 18 de julio de 1851 con los “secretos” revelados
por la Virgen María en La Salette a los pastores.
[3]
He aquí el texto
del secreto escrito por Melanie Calvat el 06
de julio 1851, entregado a Pío IX el
18 de julio, tal como se ha hallado, milagrosamente,
en Roma:
Secreto
que me dio la Santísima Virgen de la
Montaña de La Salette el 19 de septiembre
1846
«Melania, te diré algo pero no
se lo digas a nadie:
¡El tiempo de la ira de Dios ha llegado.
Si, después de que hayas dicho al pueblo
lo que acabo de decirte y lo que todavía
voy a decirte, si, después de eso, no
se convierte, (si no hacemos penitencia, y
si seguimos trabajando el domingo, y si seguimos
blasfemando del santo nombre de Dios), en una
palabra, si la faz de la tierra no cambia,
Dios hará venganza contra el pueblo
desagradecido y esclavo del diablo.
¡Mi Hijo va a hacer estallar su poder!
París, esta ciudad manchada con todo
tipo de crímenes, perecerá infaliblemente.
Marsella será destruida en un breve
tiempo. [4]
Cuando esto suceda, habrá en la tierra
un completo desorden.[un completo caos]
El mundo será abandonado a sus pasiones
impías.
El Papa será perseguido desde todas
todas partes: dispararán sobre él
(on lui tirera dessus,) querrán matarlo,
pero no podrán, el Vicario de Dios triunfará de
nuevo una vez más.
Los sacerdotes y religiosas, y los verdaderos
siervos de mi hijo serán perseguidos,
y muchos morirán por la fe de Jesucristo.
Habrá una hambruna en aquel tiempo.
Después de que hayan llegado estas cosas,
mucha gente reconocerá la mano de Dios
sobre ellos, se convertirá, y hará penitencia
por sus pecados.
Entonces un gran monarca subirá al trono,
y su reinado durará unos pocos años.[
pendant quelques années.]
La Religión florecerá de nuevo,
se extenderá por toda la tierra y la
fertilidad será grande, el mundo satisfecho
por no faltarle nada volverá a sus desórdenes,
se olvidará de Dios, y se entregará a
pasiones criminales.
Entre los ministros de Dios, y las esposas
de Jesúcristo, habrá quienes
se entreguen al desorden , y esto será lo
más terrible.
En fin, un infierno reinará sobre la
tierra. Entonces será cuando el Anticristo
nacerá de una religiosa: pero ¡desgraciada
de ella! Mucha gente le creerá, porque
dirá que él ha venido del cielo, ¡ay
de aquellos que crean en él! El tiempo
no está lejos, esto va a suceder sin
haber pasado dos veces 50 años. [¿en
la segunda mitad del siglo XX?]
Hija mía, no digas lo que acabo de decirte.
(No se lo digas a nadie, no digas que un día
tienes que decirlo, no digas nada que mire[¿se
relacione con?] a esto, no digas nada hasta
que yo te diga decirlo!»
Ruego a nuestro Santo Padre el Papa que me
dé su santa bendición.
Melanie Mathieu, pastora de La Salette
Grenoble 06 de julio 1851
JMJ +
Las
palabras: «Roma perderá la fe… se
convertirá en la sede del Anticristo… Habrá un
eclipse en la Iglesia» no están
incluidas en el texto del secreto revelado
a Melania y dado a Pío IX en 1851
Ahora,
gracias al reciente descubrimiento hecho
en Roma por el Padre Corteville, que es de
gran importancia para el conocimiento de
la historia de La Salette, las cosas están
absolutamente claras y se muestra que las
dos versiones del secreto revelado a Melanie
, escritas en 1851 y en 1873, este último
publicado en 1879, con el imprimatur del
obispo de Zola, obispo de Lecce, difieren
notablemente, ya que las palabras que María
dice a Melanie en 1846: «Roma perderá la
fe … se convertirá en la sede
del Anticristo … Habrá un eclipse
de la Iglesia» [5], que son palabras
objeto de reconocimiento y respeto casi devocional
por las corrientes sedevacantistas debido
a su carácter de “profecía”,
y que reclamarían el derecho a presentar
en ellas la situación actual de la
Iglesia, ¡no aparecen absolutamente
en el texto original del secreto revelado
a Melanie en 1846!
Ante la lectura del auténtico secreto
de 1851, vemos cómo la posición
de la Iglesia, expresada en 1910 en tiempos
del Papa San Pío X, es justa y sabia: «La
Santísima Virgen le confió a
cada uno de los dos niños un secreto
especial. Estos dos secretos que nunca ni
Melanie ni Maximino revelaron el uno al otro,
fueron enviados por ellos a Pío IX
en 1851 por consejo del obispo Bruillard.
No sabemos qué impresión causaron
en el Papa estas misteriosas revelaciones,
ya que en ellas hay dos versiones diametralmente
opuestas. El secreto de Maximino se desconoce,
ya que nunca fue publicado. El de Melania
se insertó en su totalidad en el folleto
que ella misma había publicado en
1879 en Lecce, Italia, con la aprobación
del Ordinario del lugar . Se produjo una
gran controversia sobre si el Secreto publicado
en 1879 era idéntico al que había
sido comunicado a Pío IX en 1851 o
si en su segunda forma, era simplemente efecto
de su imaginación. Esta última
opinión es la de las personas que
creen que debe distinguirse entre la vidente
Melania de 1846, inocente y simple y la visionaria
de 1879, cuya mente había sido perturbada
por la lectura de libros apocalípticos
y la vida de los Illuminati. Como Roma no
se pronunció, el conflicto continuó entre
los dos campos. La mayoría de los
defensores del texto de 1879 sufrieron la
censura de sus obispos. Maximin Giraud, después
de una vida infeliz y errante regresó a
su pueblo natal, donde murió en olor
de santidad en marzo de 1875. Melania Calvat
finalizó su vida que no había
sido menos errante en Altamura, Italia, el
15 de diciembre 1904». (La Enciclopedia
Catholica, 1910).
En
la versión del Secreto enviada a
Pío IX, la Virgen María recuerda
que no se puede hacer nada contra el Papa.
Recordamos, a nuestro propósito, y es
una actitud que nos parece que es escrupulosamente
respetada por todos los fieles católicos,
que durante el pontificado de Benedicto XV,
la Iglesia habla sobre el secreto de Melanie.
El Papa emitió un admonitum , (21 de
diciembre de 1915), es decir, un aviso oficial
de un Papa, por el cual reconoció que
había muchas versiones del secreto en
todas sus formas y sus diferentes versiones
(1851 y 1879), pero prohibió a fieles
o al clero hacer estudios sobre él o
discutirlo, sin permiso de sus obispos, indicando
además el admonitum que la prohibición
idéntica de la Iglesia publicada bajo
León XIII seguía teniendo fuerza
vinculante. [6]
Esto demuestra que en la versión enviada
a Pío IX, no hay absolutamente nada
de lo que se refiera a la Regla de una Orden
supuestamente inspirada que comenzaría
a partir de 1858, y que lejos de decir que “Roma
perderá la fe”, la Virgen María,
recuerda que no se puede hacer nada contra
el Papa. Vamos a añadir también,
y esto nos parece que debe ser tomado seriamente
en consideración por aquellos que están
atentos a los “signos de los tiempos ”,
el reciente descubrimiento de Roma, que es
la actualización de la versión
auténtica y original del secreto dada
a Pío IX, en julio de 1851, representa,
por el hallazgo milagroso de este documento,
un hecho objetivo indiscutible, lo que permite
a todos comparar las dos versiones de 1851
y 1879 , y examinar lo que tienen en común
, pero también las notables diferencias
, lo que revela la ausencia en las palabras
de la Santísima Virgen María
en La Salette, cualquier idea de «Eclipse
de la Iglesia» .
Y, como dice el adagio de las escuelas: contra
factum no valet argumentum!
Notas.
Melanie hizo saber que la revelación le había
autorizado a dedicarse a esta Orden, también llamada
de los “Apóstoles de los Últimos
Tiempos”, dando su nombrey su gobierno en treinta
y tres artículos. Cuando el obispo se negó a
ceder a sus demandas, apeló al Papa, que le concedió una
entrevista. Fue recibida sobre esta base por León
XIII en audiencia privada al 03 de diciembre 1878. Refiriéndose
a los apóstoles de los últimos tiempos
en la segunda versión del secreto dice: «Hago
un llamamiento a los Apóstoles de los últimos
tiempos, los fieles discípulos de Jesucristo,
que vivan en el desprecio del mundo y de sí mismos,
en la pobreza y en la humildad, en el desprecio y en
el silencio, en oración y en mortificación,
en castidad y en unión con Dios, en el sufrimiento,
desconocidos del mundo. Es hora de que salgan a la luz
en la Tierra. Que se presenten como mis hijos queridos,
yo estoy con vosotros y en vosotros, siempre que vuestra
fe sea la luz que ilumine en esos días tristes.
Que su celo les haga hambrientos de la gloria y la honra
de Jesucristo. Luchad, hijos de la luz, vosotros, los
pocos que pueden ver que éste es el tiempo de
los tiempos, el fin de todo». (ver El secreto
de La Salette , de fecha, escrito por Melanie en Castellammare,
21 de noviembre de 1878, Nihil obstat y el Imprimatur
Datum Lycii antigua Curia Episcopi , mueren 15 de noviembre
1879, Archus Carmelus Cosma. Vicarius generalis).
Este libro del Padre Combe, fue
reimpreso en Lyon en 1904, pocos meses antes de la
muerte de Melania,
obra que también fue puesto en el Índice. En
1906, otra publicación del Padre Combe, titulado
El secreto de Melanie y la crisis actual, a su vez fue
puesto en el índice. Estas decisiones de la Iglesia
supusieron una gran perturbación en la mente de
los católicos, por lo que tuvo que aclararse que
el mensaje original confiado a Maximino y Melanie había
sido aprobado en 1846 y que la prohibición sólo
se aplicaba a los últimos mensajes, y en particular
a los de 1872-1873, que declaraban que «Roma perderá la
fe y se convertirá en la sede del Anticristo».
En octubre de 1912, en una declaración pública
en respuesta a una petición del cardenal Luis
Luçón, Albert Lepidi OP, Maestro del Sagrado
Palacio, confirmó la aprobación
del mensaje original de 1846.
El P. Michel Corteville defendió un doctorado
en teología en 2000 en el Angelicum, la Universidad
Pontificia de los Dominicos en Roma. Este argumento fue
repetido en un libro publicado por el Padre Corteville
bajo el título: Descubre los secretos
de La Salette, Fayard, 2002.
Después de haber puesto en el papel su secreto,
fue sellado y el sobre fue llevado al obispado. Melania,
al día siguiente, dijo que ella se había
equivocado acerca de las tragedias de París y
Marsella, porque: «allí parece que suceden
simultáneamente y en realidad son sucesivas».
El canónigo Rousselot le hizo reescribir el secreto,
el 6 de julio, y el obispo Bruillard leyó el
documento antes de sellarlo.
El llamado “eclipse de la Iglesia”, en
la segunda versión del secreto escrito por Melania,
se describe así: «La Iglesia será eclipsada,
el mundo estará consternado». «Pero
entonces Enoc y Elías llenos del Espíritu
de Dios predicarán con la fuerza de Dios a los
hombres de buena voluntad, para que crean en Dios y muchas
almas serán consoladas y harán grandes
progresos en virtud del Espíritu Santo y condenarán
los errores diabólicos del anticristo. (Ver El
Secreto de La Salette , la versión publicada en
1879). Melanie también en esta segunda versión
del secreto, sostiene que María anuncia el nacimiento
del Anticristo, de una religiosa hebrea : “ Va
a ser durante este tiempo que el Anticristo nacerá,
de una religiosa hebrea, de una falsa virgen que tendrá comunicación
con la serpiente antigua, el maestro de la impureza,
su padre ; Al nacer, vomitará blasfemias, tendrá dientes,
en una palabra, será la encarnación del
diablo, dará gritos espantosos, hará prodigios,
y no se alimenta de otra cosa más que impurezas.
Tendrá hermanos que, sin ser demonios encarnados
como él, serán hijos del mal, a los 12
años, llamará la atención por brillantes
victorias que ganará, y pronto lo harán
jefe de ejércitos, ayudados por las legiones del
infierno». (ibid.)
«Utrique insuper subiaceant sanctionibus Latis
tum Leona PP. XIII Constitutionem Officiorum ac munerum
por contra, que eos Libros de rebus religiosis Contratante
sine legitimación Superiorum publicant licentia,
cum ab Urbano VIII por decretum dato Dominus Noster Sanctissimus
mueren 13 1625 Martii contra eos que assertas Revelationes
sine licentia Ordinariorum vulgant. Especial autem decretum
devotionem no vState erga Beatissimam Virginem sub titulo
Reconciliatricis vulgo La Salette nuncupatam».
(Suprema Sacra Congregatio S. Officii Decretum Circa
Dictum vulgo «Secreto de La Salette», “Datum
Romae ex Aedibus Sancti 0fficii, 21 años
mueren decembris 1915. Aloisius Castellano,
SR y Notarius
interfaz de usuario, en Acta Apostolicae
Sedis, 31 de diciembre,
1915).