Un monstruo que cabalga por las calles

Cada año, cuando llega la festividad del Corpus Christi, Granada se rinde a una tradición peculiar, a medio camino entre lo religioso y lo pagano: el desfile de la Tarasca. Un gigantesco dragón, de gesto entre feroz y burlesco, recorre las principales calles de la ciudad acompañado de una figura femenina, la "damisela", que cada año cambia de atuendo y que, para muchos, es casi más esperada que el propio monstruo.

Pero ¿de dónde viene esta extraña criatura? ¿Por qué se ha convertido en una parte tan querida y comentada del Corpus granadino? Y lo que es aún más fascinante, ¿existen otras Tarascas en España y Europa?

Acompáñenme en este recorrido por los orígenes, las mutaciones y las curiosidades de un símbolo que ha desfilado entre la leyenda, la crítica social y la fiesta.


El origen mítico de la Tarasca

El término Tarasca proviene de la palabra tarasque, que hace referencia a un monstruo legendario de la tradición provenzal. Según la leyenda, la Tarasca era una bestia temible que asolaba la región de Tarascón, en el sur de Francia, hasta que Santa Marta la domó y la condujo dócilmente hasta la ciudad, donde finalmente fue destruida por los habitantes.

La historia fue recogida en la Leyenda Dorada de Santiago de la Vorágine, texto fundamental del siglo XIII que inspiró muchas de las representaciones medievales de santos y milagros. Desde ahí, la Tarasca se expandió por Francia y España como símbolo del mal derrotado por la fe.

(Fuente: Vorágine, Santiago de la. "La Leyenda Dorada". 1260)

En este contexto, la Tarasca no es sólo un monstruo: representa los vicios, los pecados y el caos que son doblegados por la virtud cristiana.


La Tarasca en Granada: tradición y crítica social

En Granada, la Tarasca aparece documentada desde el siglo XVI como parte de la procesión del Corpus. Lo curioso es que, mientras que en otras ciudades la figura de la Tarasca solía mantener un tono solemne o religioso, en Granada adquirió con el tiempo un carácter satírico y casi carnavalesco.

El desfile de la Tarasca suele abrir el día central de las fiestas. El monstruo, un dragón de grandes dimensiones, es "montado" por una figura femenina que no tiene nombre oficial pero que el pueblo llama popularmente la "maniquí" o "la dama". Lo realmente singular es que cada año esta figura es vestida con un conjunto a la última moda, casi siempre diseñado por modistos granadinos, lo que convierte al evento en un escaparate popular y humorístico.

A través de los años, la Tarasca se ha convertido también en un termómetro social. No son pocos los años en que el vestuario de la dama ha generado controversia: desde trajes inspirados en famosas hasta diseños que han suscitado debates sobre el buen gusto, la provocación o la sátira política.

Uno de los ejemplos más sonados ocurrió en 2016, cuando la dama desfiló vestida de superheroína, generando un intenso debate sobre la adecuación o no del atuendo en un contexto religioso.


Un desfile con banda sonora

El paso de la Tarasca por las calles de Granada no sería lo mismo sin la música que la acompaña: las conocidas Gigantes y Cabezudos y pasacalles populares, que crean un ambiente festivo que nada tiene que ver con la solemnidad de la procesión eucarística.

Este desfile previo al Corpus se convierte, de hecho, en la cara más lúdica de la fiesta, un momento donde la crítica social, la risa y la sátira tienen su espacio sin ofender directamente a la religiosidad del evento.


Otras Tarascas en España y Europa

Aunque la Tarasca de Granada sea la más conocida, no es la única. Otras ciudades españolas, como Toledo, Valencia y Sevilla, también han contado históricamente con sus propias Tarascas, aunque en muchos lugares la tradición se ha perdido o ha adoptado formas diferentes.

• Toledo: Conserva todavía su Tarasca, aunque con un enfoque más estático, donde el monstruo participa en la procesión con una figura femenina vestida al modo tradicional.
• Valencia: En el siglo XVIII, la Tarasca tenía su lugar en el Corpus, aunque fue retirada y posteriormente recuperada con carácter festivo.
• Sevilla: Durante los siglos XVI y XVII, Sevilla tuvo su Tarasca como parte de las "danzas de gigantes" del Corpus. Hoy, la figura ha desaparecido, pero el recuerdo permanece en los archivos históricos.

Fuera de España, encontramos referencias a la Tarasca en la Tarasque de Tarascón (Francia), donde cada año, desde 1474, se celebra la Fête de la Tarasque, una fiesta declarada Patrimonio Cultural Inmaterial por la UNESCO. Allí, el monstruo sigue recorriendo las calles y la leyenda de Santa Marta aún es parte viva de la celebración.
(Fuente: UNESCO. "La Tarasque de Tarascon". Patrimonio Cultural Inmaterial)


La simbología: entre lo pagano y lo cristiano

Lo más fascinante de la Tarasca es su capacidad para moverse entre dos mundos: lo religioso y lo profano. Aunque nace como representación del mal vencido por la fe, en ciudades como Granada se ha convertido en un espacio de libertad donde cabe la sátira, la moda e incluso la crítica social.

Este doble carácter se ha mantenido a lo largo de los siglos, permitiendo que la tradición sobreviva adaptándose a cada época. La Tarasca no es sólo una figura monstruosa, es también un espejo de la sociedad que la contempla.


Gráficos y Material Complementario

1. Línea cronológica: Evolución de la Tarasca desde la Edad Media hasta hoy

La tabla contiene los hitos fundamentales en la historia y desarrollo de la Tarasca, desde su leyenda originaria hasta las manifestaciones actuales.

Hitos principales a destacar:

Fecha / Siglo	Evento destacado
Siglo XIII (~1260)	Creación y difusión de la leyenda de Santa Marta y la Tarasca en Provenza (Francia), recogida en La Leyenda Dorada de Santiago de la Vorágine.
1474	Primera documentación del desfile de la Tarasque en Tarascón (Francia), con arraigo medieval consolidado.
Siglo XVI	Introducción de la Tarasca en España, principalmente en el Corpus Christi de Granada.
Siglo XVII-XVIII	Expansión y consolidación en ciudades andaluzas como Granada, y también en otras regiones como Castilla (Toledo y Valencia). Aparece la figura femenina acompañante.
Siglo XIX	Popularización y desarrollo festivo, incremento del componente satírico y lúdico.
Siglo XX	Modernización del desfile, interrupciones por conflictos bélicos y adaptación a nuevas sensibilidades sociales.
Siglo XXI	Consolidación de la Tarasca como espectáculo cultural; introducción de vestidos polémicos para la dama y debates sociales sobre tradición y modernidad.

2. Distribución de las Tarascas en España y Europa

Localizaciones destacadas:

Lugar	Características principales
Tarascón (Francia)	Cuna histórica del monstruo; desfile medieval anual con fuerte arraigo patrimonial.
Granada (España)	Desfile popular del Corpus Christi; gran protagonismo de la dama con vestuarios cambiantes.
Toledo (España)	Celebración más sobria y tradicional, con vestuario clásico para la dama.
Valencia (España)	Incorporación más reciente, adaptando la figura al folklore local.
Ciudades menores en Francia	Festividades similares con variantes regionales del monstruo Tarasque.

Anexos

Anexo I: La leyenda de la Tarasca según "La Leyenda Dorada"

La Tarasca encuentra su origen en la leyenda medieval recogida en La Leyenda Dorada (c. 1260), escrita por Santiago de la Vorágine. Según el relato, la ciudad de Tarascón, situada a orillas del río Ródano, estaba aterrorizada por un monstruo terrible, con cuerpo de buey, cabeza de león, seis patas cortas, cola de serpiente y caparazón de tortuga. Esta criatura, conocida como la Tarasca, causaba destrucción y miedo entre los habitantes.

La salvación llegó con la llegada de Santa Marta, quien, guiada por su fe y valentía, se enfrentó a la bestia. Con oraciones y agua bendita, logró amansarla y conducirla a la ciudad, donde los ciudadanos, al ver el dominio de la santa sobre el monstruo, acabaron con él. La historia de la Tarasca se convirtió así en un símbolo de la victoria del cristianismo sobre las fuerzas del mal y el caos.

Este mito medieval no solo sirvió como enseñanza religiosa, sino que evolucionó hasta convertirse en una tradición popular en diversas regiones, siendo la figura de la Tarasca un elemento destacado en festividades y procesiones, como el Corpus Christi en Granada y la propia Tarascón.


Simbolismo e impacto cultural:

La Tarasca representa el mal domado por la fe, un mensaje muy potente en la Europa medieval, cuando la religión condicionaba casi todos los aspectos de la vida social. La dualidad entre la figura monstruosa y la dama que la monta en los desfiles es una reminiscencia de este mito: la dama simboliza el triunfo de la virtud y la civilización sobre lo salvaje.


Anexo II: Recorrido histórico de la Tarasca en las actas municipales de Granada

El archivo histórico del Ayuntamiento de Granada ofrece documentos que datan desde el siglo XVI, donde ya se menciona la Tarasca como parte del cortejo festivo del Corpus Christi. Inicialmente, la figura se representaba como un monstruo sencillo de madera, pero con el tiempo se incorporó la figura femenina, que vestía siguiendo la moda de cada época.


Evolución documentada:

• Siglo XVI: La Tarasca es descrita como un elemento singular, atrayendo la atención del público. Las crónicas municipales resaltan la presencia de gigantes y cabezudos, aunque no se menciona un componente satírico.
• Siglo XVII: Comienzan a aparecer referencias al vestido de la dama, que se convierte en un foco de atención por su lujo y por los detalles satíricos de sus atuendos, que a menudo criticaban indirectamente a personajes o situaciones sociales.
• Siglo XIX: La Tarasca alcanza gran popularidad, con desfiles que duran horas y que incluyen música, bailes y una amplia participación ciudadana. La vestimenta de la dama empieza a ser motivo de discusión pública.
• Siglo XX: Interrupciones durante la Guerra Civil española y posteriores limitaciones durante la posguerra afectan a la celebración. No obstante, la Tarasca se recupera y moderniza a partir de los años 70, introduciendo innovaciones en la escenografía y el vestuario.
• Siglo XXI: La Tarasca se consolida como símbolo cultural y social. La evolución de los vestidos de la dama ha generado debates sobre los límites de la tradición y la modernidad en las fiestas populares.

Estos documentos se conservan en el Archivo Histórico Municipal, accesibles para investigadores y público general, y reflejan la importancia de la Tarasca en la identidad granadina.

Anexo III: Cronología de las polémicas en el vestuario de la dama de la Tarasca (2000-2020)

Desde principios del siglo XXI, el vestuario de la dama que monta la Tarasca ha sido fuente recurrente de controversias y debates sociales. La figura femenina, tradicionalmente símbolo de elegancia y feminidad clásica, ha servido para expresar mensajes sociales, políticos y culturales, lo que ha suscitado reacciones muy diversas.

Año	Descripción del Vestuario	Contexto de la Polémica	Reacción Social
2003	Vestido estilo punk	Ruptura con la tradición conservadora	Rechazo por sectores tradicionales, debates en prensa local.
2009	Representación de una política local	Acusaciones de politización del festejo	Amplio debate mediático y social, defensa por parte de jóvenes y críticos.
2016	Disfraz de superheroína	Controversia sobre modernización y respeto a la tradición	Opiniones divididas: apoyos por innovación, críticas por pérdida de esencia.
2019	Vestuario futurista con motivos tecnológicos	Debate sobre la identidad cultural y estética	Críticas y elogios, reflejando una sociedad en cambio.

Impacto social:

Estos episodios han funcionado como un espejo de la sociedad granadina, mostrando las tensiones entre modernidad y tradición, política y cultura, conservadurismo y renovación. La Tarasca no es solo un espectáculo visual, sino un espacio donde la ciudadanía expresa sus ideas y debates.

Fuentes:

Se recogen artículos periodísticos, entrevistas a organizadores, miembros de la comisión de fiestas y vecinos, así como análisis en revistas culturales locales.


Anexo IV: Fotografías históricas y comparativas

• Tarasca histórica del siglo XVII (ilustración acuarelada)
  Procedente de la Biblioteca Digital Memoria de Madrid, esta imagen muestra una Tarasca temprana —un monstruo serpentino— formando parte de una procesión del Corpus en los siglos XVI–XVII, lo que pone de relieve su larga presencia en España alamy.com+12historylab.es+12larazon.es+12.
  
  

Tarasca granadina a inicios del siglo XX, con su dama vestida al estilo clásico.

Imagen de la Tarasca granadina a principios del siglo XX, donde se aprecia la estructura original de madera y la figura femenina con un atuendo tradicional de la época. La composición refleja la estética clásica que acompañó a la fiesta durante décadas.

• Tarasca granadina actual (fuente: IAPH)
  Fotografía contemporánea del desfile granadino, con la figura femenina montada sobre el dragón, acompañada por gigantes y cabezudos —y claramente sacada durante el Corpus Christi— lavanguardia.com+5iheritage.eu+5los40.com+5.
  
  
  

Desfile actual de la Tarasca en Granada durante el Corpus, con la dama y la comitiva festiva.

La Tarasca granadina en su formato actual desfila cada año durante el Corpus Christi, acompañada por gigantes y cabezudos que completan el cortejo festivo. La figura femenina, siempre montada sobre el dragón, presenta cada edición un vestuario diferente, convirtiéndose en uno de los elementos más esperados y comentados por la ciudadanía. La fotografía recoge a la perfección el ambiente alegre y popular que rodea este desfile, uno de los momentos más lúdicos de las celebraciones granadinas.

• Desfile reciente en Granada (La Vanguardia, 2022)
  
  Imagen de la Tarasca en plena calle, capturada por Xavier Vilaltella Ortiz, que refleja el cuidado montaje escenográfico y el ambiente multitudinario que acompaña al desfile larazon.es+4lavanguardia.com+4lavanguardia.com+4.
  
  

Imagen del desfile de la Tarasca en 2022, con ambiente festivo y público multitudinario.

Instantánea del desfile de la Tarasca en Granada, capturada por Xavier Vilaltella Ortiz en 2022. La fotografía muestra el paso de la comitiva por las principales calles de la ciudad, rodeada por un público multitudinario.

La escena refleja el esmero en el montaje escenográfico, con la Tarasca y su dama avanzando entre gigantes y cabezudos en un ambiente festivo y familiar que llena cada rincón del Corpus granadino.

• Tarasque de Tarascón (Francia)
  Escultura monumental en piedra de la Tarasque provenzal, instalada en Tarascón, que muestra el origen medieval del monstruito francés —posiblemente su recinto del desfile medieval—
  
  

Estatua de la Tarasque en Tarascón, Francia, símbolo histórico del monstruo legendario.

Escultura monumental en piedra de la Tarasque, situada en la localidad de Tarascón, en la Provenza francesa. Esta representación fija recuerda el origen medieval del monstruo y su legendaria relación con Santa Marta, quien, según la tradición, logró domesticarlo. La figura permanece como símbolo histórico y cultural, y es uno de los puntos emblemáticos del recorrido del desfile medieval que la ciudad celebra cada año desde el siglo XV.

Bibliografía

• Vorágine, Santiago de la. La Leyenda Dorada. 1260. Edición consultada: Alianza Editorial, 1995.
• García Luque, María Isabel. La fiesta del Corpus en Granada: historia, símbolos y tradiciones. Ed. Universidad de Granada, 2011.
• Gómez-Moreno, Manuel. Guía de Granada. Editorial Imprenta Alemana, 1892.
• UNESCO. Patrimonio Cultural Inmaterial: La Tarasque de Tarascon. Consultado en: unesco.org
• Ayuntamiento de Granada. Archivos Municipales sobre la organización del Corpus Christi.
• Ruiz, Antonio. "La Tarasca y la polémica: crónica de sus desfiles más comentados". Ideal de Granada, 2016.
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