Presentación
del Cartel de la Semana Santa Padul 2013
Presentó Don Lázaro Martín Romera
Centro Cultural Federico García Lorca
16 de febrero del año 2013
Difícil tarea es la del fotógrafo; conseguir
plasmar en una instantánea, el momento, el enclave
y la idea que hagan vibrar a los sentidos del espectador;
Lograr lo autentico, encontrar el sitio, la luz, la coyuntura
precisa para retener en milésimas de segundo la imagen
que nos traerá al recuerdo de ese instante tan emotivo
y que a la vez sintonice con la idea que tenemos de la Semana
Santa particular y personal que nos caracteriza.
De esta manera, Laura Romero de la Puente, (a quien desde
aquí felicito por realizar esta fotografía
que compone el cartel de Semana Santa 2013); a conseguido,
llegar, quizás inconscientemente, al alma de una
hermandad, plasmando en la película el momento en
el que la cofradía sale a la calle, situación
ésta, que reúne muchas particularidades, que
seguidamente detallaré.
En esta misma línea analógica se ha de mover
el anunciante del cartel; ha de conseguir transmitir esos
momentos gráficos, desgranando en detalles lo que
se ve y lo que no se ve, lo físico y lo espiritual
creando una simbiosis entre la idea del cartel y el espectador;
tarea difícil que se me ha encomendado pero que asumo
con gran gusto e ilusión.
Agradeciéndoles a mi hermandad y a todos ustedes
esta maravillosa oportunidad que me brindan para presentar
el cartel anunciador de nuestra semana de pasión
2013.
Así pues, mi agradecimiento más sincero a
Hermanos cofrades, costaleros y amigos que han hecho posible
que este aquí ante vosotros para intentar transmitir
mis anécdotas, experiencia vivida y mi idea acerca
del cartel anunciador, dentro de la hermandad de la Flagelación,
más conocida como los Sayones.
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Señor cura párroco.
Excmo. Señor alcalde /represéntate del Excmo.
Ayuntamiento de Padul.
Señor presidente de la Federación de Hermandades
y Cofradías de Padul.
Hermanos Mayores y Juntas de Gobierno.
Cofrades, Costaleros y amigos todos.
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Desde la calle horno, bajo el pretil de la iglesia, casa
de hermandad de puertas abiertas, se recoge en esta foto,
la escena de puesta en marcha de uno de los pasos de misterio
de la semana santa paduleña. La Flagelación,
que tras franquear alto pórtico se abre paso dificultoso
que ofrece la rampa y la estrechez de su calle.
En volandas se
alza tu pedestal de plata en un mar de gente, mecido por
hombros curtidos, en sones de amargo atardecer.
Roce de lirios y terciopelos en la antigua muralla mora
y cristiana, Silencio roto por la voz del capataz que llama,
y pronta está la penitencia del costalero. Cornetín
que anuncia el silencio de un reo cruelmente azotado.
¡¡Veis!!. El flagelo de Gabiarras, suspendido
en el aire, ingrávido, detenido en el tiempo.
Gabiarras de feroz mirada, ciega, loca, sin sentido, hace
manar sangre divina.
Aprieta los dientes y retuerce la áspera soga ensangrentada
sobre su pierna, sin importar el quejió del que con
dulzura mira.
¡Cíñete fuerte el turbante, Pilón!,
no sea que en tu rabia, caiga al manchado pavimento y te
haga enfurecer más.
Jesus.es a ti, a quien golpean. ¿No los ves? ¿En
qué Piensas?
Hieren con furia tu cuerpo, y aun ¿no protestas?
Hincan sus pies, sólidos en el enlosado e intentan
hundirte.
Te mantienes sereno y firme, como si contigo no fuera.
No te importa los golpes y buscas entre la gente; nadie
los detendrá.
Y tú. ¿Tú no te quejas? ¿A quién
buscas con tu mirada?
¿Dónde están aquellos, que por ti darían
la vida? ¿Donde aquellos que fueron saciados de hambre?
¿Donde están los, sanados de sus penurias
mundanas?
Ataron tus manos a la fría columna, para que no obraras
el prodigio de crear amor.
El ciego, el paralitico, el leproso, Lázaro, Pedro…..
Solo. Te has quedado solo.
Desnudo, amarrado de cuello y manos, te inclinan a golpes,
sobre el frio pedestal.
Aseguran con tu sangre que eres humano, Dios contigo no
está, por eso se deleitan en cada golpe.
Bendita mirada, la tuya – Cristo- que aun en los duros
latigazos de la vida se mantienen sosegados, dulces y llenos
de ternura.
Eternos los golpes buscan tu debilidad humana.
Bendita tu actitud-Jesús- firme, segura, y de semblante
majestuoso.
Enséñame maestro esa virtud que tanto me cuesta.
Bendita la madre que te parió, Maestro, quiso el
destino que estuviera a tu lado, María Santísima
del Valle, aliviando tu sufrimiento.
Y despacio, muy despacio se alejan por el fondo de la calle,
entre nubes de incienso, levantás al cielo y negros
atardeceres.
Aromas, melodías y mágicas visuales, se difuminan
al fondo del barrio y todo pasa, como un sueño, todo
pasa….
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Me viene a la
mente, el recuerdo de mi primer contacto con la imagen de
los Sayones,-que por cierto-¿que significa sayón?,
no han sido pocos los que lo han preguntado, y buscando
en la enciclopedia aparecen estas definiciones:
Sayón:
Verdugo, persona encargada de ejecutar
a los condenados a muerte.
Cofrade que en las procesiones de
semana santa va vestido con túnica larga.
De esta manera
pienso, que salvando la primera definición, bastante
acertada para las tallas.
La segunda es que tenemos bastantes sayones en Padul.
Como decía, mi primer contacto con estas imágenes
fue a la temprana edad de nueve años ,por ese tiempo
servía como acolito en nuestra parroquia de Padul.
El sistema automático de toque de las campanas aun
no estaba instalado y había que hacerlo a mano.
D. José Delgado Martin, sacerdote muy querido por
la chiquillería de este pueblo y del que guardo muy
gratos recuerdos ,me mandó a tocar a misa.
En la sacristía, me explicó muy bien donde
tenía que ir, de qué cuerda tirar (pues había
tres).con que cadencia tenía que ser el toque, incluso
la cantidad de tirones de cuerda; Dicho y hecho, bajé
al fondo de la gran nave eclesial y tras franquear la puerta
de acceso al campanario, entre penumbras, me dispuse a realizar
tan digno encargo.
La sorpresa del sacerdote fue mayúscula pues creo
que no tarde ni un minuto en presentarme otra vez en la
sacristía.
Blanco como la cera relate que ya había efectuado
la encomienda. A lo que él replico que no había
escuchado los toques de campana.
Ciertamente, le dije , todo me lo había explicado
bien, pero lo que no me dijo fue, que tras de la puerta
había un rígido guarda de mirada atravesada,
con intención de golpear al primero que pasara por
allí.
-¡Don
José, hay un tío casi en pelotas, y con
muy mala leche detrás de la puerta del campanario!
-¡Hombre, Lázaro!-, (reía a carcajada
limpia)-Es solo un sayón. ¿Has tocado a
misa?
-Pues creo que no!! ¡No ve como me tiemblan las
piernas!.Si casi repico!!
Esa tarde tuvo que tocar él.
Desde entonces
fue acertada la nueva ubicación de las imágenes
en el pedestal que hoy ocupan. Pues no fui yo solo el que
pasara por esta experiencia. Encontrar imágenes de
este tipo tras las puertas o a la subida del campanario-caso
del sayón Pilón-; no es muy agradable.
Ese fue mi primer contacto con estas figuras.
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He pensado muchas
veces, en que se inspiro el escultor granadino D. José
Navas Parejo.
Imaginero que dejo en nuestro pueblo dos de sus mejores
tallas, la oración del huerto y la flagelación.
Grupos escultóricos de dos y tres tallas que nos
trasladan a las escenas de la pasión de Cristo.
En uno, Jesús, arrodillado en tierra, se sustenta
en una gran piedra mientras un alto ángel de suaves
facciones y sujetando un cáliz, lo alienta. Magnífica
la oración del huerto.
Los mismos rasgos, mantiene el Cristo de la flagelación.
Su cara, llama poderosamente la atención, a la vez
que su aire majestuoso erguido junto a la columna, seguido
de dos esbirros.
¿Pensó, Navas Parejo, a la hora de de realizar
esta obra, qué tenía que sugerir?
¿Qué debía ver, el devoto feligrés
al contemplar estas figuras?
Personalmente, no se corresponde esta imagen con la de una
persona atormentada a latigazos.
Al contrario-los verdugos- si manifiestan su cruel acción.
Pilón y Gabiarras, nombre con el que popularmente,
aquí en Padul se conoce estas imágenes y cuyo
significado no aparece como nombres propios, clásicos.
Más bien utilizados como adjetivos calificativos,
o motes .Podría ser que Pilón, hace referencia
a la pesa que se desplaza por el mástil de una romana,
para equilibrar los pesos, también piedra grande;
de todas formas se referiría a algo pesado y basto
como este barbudo sayón.
Y Gabiarras, del que no he encontrado una buena definición,
la más parecida, gavia o con terminación despectiva
,Gabiarras;vela del mástil de un barco y en portugués
como gambirarra o gamberrada, pueden atribuirse bien al
sayón del brazo en alto, igual que la vela de un
mástil y corpulento gamberro. El que busco los nombres
llevaba su idea.
Para conseguir mayor efectividad, ambos sayones, son zocatos,
y bizcos de proporciones toscas. -Gabiarras- imberbe ,de
ojos saltones Sostiene en lo alto de su mano izquierda,
el temible “flagrum”romano o látigo compuesto
por un corto mango de madera y cuatro tiras de cuero de
las que penden unas bolitas de plomo; va ataviado con un
singular entramado de cuero que lo hace más burdo
y fiero; Mientras Pilón, luce una vasta túnica
corta a la altura de las rodillas, un ceñido turbante
al igual que su compañero y una espesa barba, mientras
sostiene en su regazo una cuerda trenzada.
Así pues-por sus turbantes, vestido y fisionomía,
era típicos judíos mercenarios.
Atendiendo a la historia, no se hace referencia directa
sobre quiénes fueron los ejecutores de este acto,
se sabe que,- Pilatos lo entregó a la soldadesca
para que lo azotaran-, por lo cual se deduce que fueron
soldados romanos y no los propios judíos o mercenarios
contratados por el pueblo de Roma -(como ocurre en el caso
de las dos figuras o sayones)- , ya que éstos, los
romanos- le tenían un odio mortal, al pueblo judío.
De todas maneras, aquí sí consiguió
Navas Parejo su propósito de mostrar al público,
que el acto realizado por los sayones bizcos, zocatos y
contratados como mercenarios- era feo, grotesco; el hecho
de ejecutar a una persona es terrible, pero si además
lo hacen con estas “pintas”, casi duele más.
Todo lo contrario ocurre con la figura de Jesús,
La fina belleza en sus líneas, la paz que irradia,
su semblante sereno ,su porte soberano ,es realzado por
los sayones, que a pesar de su terrible aspecto realzan
aun más si cabe la belleza de la imagen de Cristo.
Más bien aparece sumiso, humilde, sus músculos
lo delatan, no están tensos ni existe rigidez en
ellos. Su expresión es de total entrega, su cabeza
ligeramente inclinada hacia delante mira del lado derecho
y hacia el suelo.
Las heridas que muestra su cuerpo son pocas, pero distribuidas
por toda su anatomía .Sale sangre desde su cabeza
hasta los pies y manos .Cárdeno el golpe y de amplios
goterones de sangre.
Desnudo, aunque tapado por un sudario blanco, muestra un
cuerpo musculoso y proporcionado, sus brazos amoratados
por la tirantez de la soga, tira a su vez del cuello, afianzándolos
a la negra argolla de una columna de un metro de alzada.
Sus piernas,-envidia de un buen corredor de maratón-aparecen
semiflexionadas, la izquierda por delante de la derecha,
estabilizando el cuerpo y ofreciendo toda la amplitud de
su espalda a merced de los verdugos.
El cabello largo cae sobre sus hombros, peinado con la raya
en medio dejan al descubierto una cara despejada, finas
cejas, nariz prominente, ligero bigote y barba partida en
dos.
Su boca entreabierta y sus ojos castaños; sus ojos
lo dicen “tó”.
Mirarte, Cristo flagelado, hiela el alma, por que tus ojos
hablan, lo dicen todo, y nada se escapa.
Dices, y tu boca entreabierta no gesticula palabra.
Desnudas al Ser, creado y produces vértigo en el
cosmos de tu mirada.
Llamas al fondo de mi espíritu y entiendo cual párvulo
las dulces palabras de su papá.
No hay secreto o engaño porque tú dices verdad,
más aun, ERES LA VERDAD.
Aunque las preguntas que te hago se atropellen, en tu pose
hay calma y el verdadero secreto de ti emana.
Ahora entiendo al imaginero que de maderas nobles te tallara.
Gubias que buscaron lo divino y lo humano, que rasgando
la madera encontraron la manera de decir,-a pesar de todo-,
TE AMO.
¿Como de este ejemplo que me das, no voy yo a cambiar?
Dejarlo todo quisiera, mas las ataduras de la vida, a lo
efímero nos amarran, sabiendo que LO ETERNO ESPERA
en hacer tú divina voluntad, aunque no lo entienda.
Este y no otro es el secreto que me gritas desde tus ojos,
HACER LA VOLUNTAD DEL PADRE.
Aunque con saña te hieran.
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Terminando estas
apreciaciones acerca de las imágenes, comentaré
que también me llama la atención las peanas
o soportes sobre las que se sustentan las figuras; ¿Os
habéis fijado?
Forman un hexágono, una figura muy particular de
unir mediante un intrincado “tetris” a los bustos.
La peana del Cristo es cuadrada, mientras que la de los
sayones adoptan un diseño enrevesado, que se adapta
a la base del Cristo. A lo que me pregunto; ¿También
quiso la escuela de Navas Parejo mostrar simbolismo al darle
esta configuración a las bases? ¿O es mera
estética? La figura en la base de Jesús,-
un cuadrado perfecto-, los sayones- bases de forma irregular
y complicada como ellos-.
En el transcurso del tiempo, han procesionado, las imágenes
- (por lo que sé)-,en un carro antiguo; en sus primeros
desfiles, manteniendo las peanas juntas debido a la reducida
capacidad del transporte ,reduciendo al máximo de
lo que aquel tiempo permitía los exornos florales,
con bastante sobriedad, pero muy dignamente, portaba incluso
la corona del Cristo unas pequeñas lucecitas o perillas
para realzar sus divinidad en calles oscuras; Gabiarras
llevaba en su mano un pincho o cambrón y la columna
una enredadera o hiedra dándole más vida.
Así fueron nuestros primeros piostres, Ingeniosos.
Pero fue por los años ochenta, cuando Manuel Gámez
junto a un grupo de emprendedores paduleños gestionaron
y reformaron este paso creando lo que conocemos hoy dia.Jesus
flagelado hace estación de penitencia en un trono
de alpaca plateada, la disposición de las imágenes
es más amplia, dando más realismo a la escena.
Hace poco se coloco a los pies del Cristo una clámide
o manto purpura, una corona de espinas y una caña,
simbolizando con estos detalles la posterior escena bíblica
del Ecce Homo.
-(Tras
ser azotado, se presento al pueblo como rey de los judíos,
coronado de espinas portando una caña como cetro
real y cubierto por un manto purpura)- . Es portado por
un grupo de jóvenes tanto de Padul como de pueblos
colindantes, y el cortejo es más amplio.
Todo lo detallado
hasta ahora nos muestra este cartel; lo que se ve, lo que
sugiere, y me he quedado “corto”.
Pero el trasfondo de una hermandad va más allá
de una imagen, lo difícil de trasmitir es lo que
no se ve, lo sentimental, espiritual.
No he conocido Semana Santa sin estar fuera de ella, aun
no lo he concebido; participé como monaguillo, penitente,
costalero y capataz .Buenos recuerdos guardo de todas las
hermandades y cofradías por las que he pasado y a
las que sigo vinculado como hermano cofrade y amigo de cuantas
actividades y actos a ellas se supeditan.
Si algo he aprendido en todos estos años de actividad
cofrade, -y sé que es grande el bagaje, -es saber
valorar la actividad abnegada, de todos aquellos que se
mueven dentro del mundo cofrade.
No son pocas las personas que permanecen en “segundas
filas o líneas”, aquellos que están
detrás dé. Hombres mujeres y niños
que trabajan alrededor de las cofradías y hermandades
durante todo el año para hacer posible esta catequesis
plástica, permaneciendo cerca del cortejo de su hermandad.
Restan importancia a su protagonismo dentro del desfile.
Son estos nuevos valores humanos los que llaman la atención
y tiran de mi persona a descubrir este punto de vista en
“esas segundas líneas”.
Todas las hermandades, han de luchar por convertirse en
una gran familia, reunidas en el marco común del
mensaje de Cristo. Amarnos y respetarnos los unos a los
otros sin distinción de rangos o cargos llevando
a la calle el verdadero mensaje de una sociedad movida por
la fe.
Desde aquí quiero lanzar una voz de ánimo
a todos vosotros, “verdaderos motores” de cofradías
y hermandades, sin excluir a nadie, desde el Hermano Mayor
hasta el más humilde “Pipotero”.
No debe quedar, en una semana santa mas, nuestra actividad
de servicio a los demás, lo aprendido durante tanto
tiempo ha de reflejarse en el día a día de
nuestras vidas, para que cobre sentido y hagamos honor a
la encomienda de aquel que procesionamos por las calles.
Á nimo, al que ha participado y al que participará
en la Semana Santa paduleña, por que la hacéis
grande, manteniendo viva la FE y la tradición de
un pueblo.
Mucho ha cambiado la semana santa que conocí de niño
a la que conozco hoy, desde la gran cantidad de enseres
por cofradía, hasta las personas que en ellas desfilan;
con la particularidad de que la mujer que antes se veía
excluida, ahora forma una pieza importantísima dentro
del mundo cofrade, dando aires nuevos a las hermandades.
La hermandad de la Flagelación, ya apostó
a principios de los 90, por incluir dentro de de su cuerpo
de costaleros un grupo mixto de hombres y mujeres que aún
perdura.
Puri, Paqui,
Toñi, Reme, Silvia, mujeres valientes, arriesgadas
cirineas del Cristo del sigloXXI que no les importó
el peso sobre sus hombros ni el pesado machismo de la sociedad.
Que llevan con orgullo al igual que sus compañeros
a Jesús flagelado por las calles de Padul.
No puedo olvidar en este momento a muchos nombres ligados
a la existencia de esta hermandad y a lo que es hoy día,
nombrarlos a todos seria una empresa difícil pues
caería en la falta de no saber cualificarlos por
su gran labor. Sentíos por aludidos.
A todos vosotros, Sayones, en el sentido más cariñoso,
que un día partisteis al cielo sin esperar al próximo
viernes santo, y ahora disfrutáis de la eterna presencia
de un Jesús sin ataduras, sin sangre, todo LUZ.
A vosotros, Sayones, que padecéis enfermedad, en
vuestro sufrimiento nos mostráis los golpes de la
vida y la esperanza de la salud puesta en Jesús atado
a la columna.
A vosotros, Sayones, que el paso del tiempo os ha echo mayores,
estáis realizando el trabajo más grande que
de la vida se puede pedir, y es enseñarnos a SABER
VIVIR.
Por eso, que al pasar las divinas imágenes, por tu
calle, cerca de tu puerta, abierta de par en par, se eriza
mi piel y siento escalofrió, al ver los rostros del
que ha perdido, del enfermo y del anciano, con tímidas
lagrimas, en su expresión parecen gritar desde su
corazón, con rogativas contenidas por no hacerte
sufrir más.
No quiero terminar esta exposición sin aludir a todos
los que vivimos con intensidad la recién estrenada
cuaresma.
Somos los verdaderos anunciadores-, no solo del cartel,
pregón o nuestra Semana Santa. Somos heraldos de
un mensaje que a pesar del tiempo no ha envejecido, ni ha
enfermado ni a muerto.
Somos los portadores de una VERDAD ETERNA que exulta desde
nuestro interior.
Cristo VIVE.
Y con tan gran posesión en lo recóndito, hemos
de brillar cual antorchas iluminando al mundo, desde nuestra
pequeñez, nuestra torpeza, nuestros defectos y virtudes,
aprendiendo de los fallos para corregirnos y levantarnos
siguiendo el ejemplo de tan insigne Maestro.
A veces dudo y me cuesta trabajo, pero SE que estas ahí.
Confía- me dices, nunca te he fallado, -Confía.
Y esto me hace fuerte. Nos debe hacer fuertes.
Y bien. El que
me conoce, sabe que no me gusta mucho ser serio, bastante
seriedad tiene la sociedad.
Hay que poner una sonrisa en la vida. Estoy seguro de que
el Nazareno era así; Alegre, bromista y siempre con
una sonrisa de oreja a oreja, irradiando seguridad. Como
el niño que se siente querido y protegido por su
padre. Esto hemos de aprender y yo me apunto.
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¡Cuántas
anécdotas simpáticas he dejado en el tintero
de mi equipaje junto a “los hombres malillos”!.Porque
así también nos conocen la chiquillería
de Padul.los hombres malillos, los que salen el Viernes
Santo pegándole a Jesús.
O de aquel que nos dejo un donativo para Gabiarras, alegando
que sería bueno pedir una cita al oftalmólogo,
para ver si podía solucionar lo de esos ojos tan
fastidiados.
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En fin. Acabo
mi exposición acordándome de lo que tanto
he sentido, experimentado y vivido. El mundo del costalero.
Sentíos todos reflejados en estos pasajes; costaleros,
costaleras, portadores, contraguías, capataces, ipoteros,
mantillas, penitentes… Todos somos uno, no importa
el titulo de de la hermandad pues Cristo es uno en todos.
Rocé de zapatillas cansadas y el aliento entrecortado
hacen un esfuerzo más por terminar lo que se ha empezado.
Calles, avenidas y plazas de curiosas miradas se llenan
ante singular cortejo.
Alegre traen el paso, valientes costaleros, para la muerte
de un Cristo ajusticiado.
No importa el peso ni estar cansado, pues cariño
derrochas al Jesús maniatado.
Ya se distingue al fondo de la calle horno los destellos
de plata.
Cirios consumidos, cera en el suelo, fatigadas promesas
se pierden al llegar a tu templo.
Ronca la voz del capataz, afónico el ánimo
por encima de los sones de regreso.
“¡¡Tos por igual!! “ y enmudecen
los elementos. Levantá seca que se para en el tiempo.
Que cerquita pasas por el balcón, del barrio de mi
alma. Casi puedo tocarte, Cristo.
Arrancan emociones en el cadencioso vaivén, tus costaleros.
Transformando la melodía ,en nanas que acurrucan
tus penas.
¡¡ Que arte tienen!! ¡¡Duro con
él, Valientes!! Cristo ríe en su paso.
La noche se hace mañana, entrando en tu casa.
Despacio, muy despacio atraviesas el umbral de la puerta,
perdiéndote de mi estirada vista.
Eterno el momento fuera; verte entre algodonadas nubes de
incienso.
Secos golpes
de llamdor,suave, en el suelo te posan.
Surgen de ti exhaustos jóvenes, despertando de un
sueño del que maravillas hablan.
Abrazos,
besos y satisfacción en sus caras.
Nazarenos, mantillas y cofrades, miran hacia ti, cuando
el pórtico se cierra.
Ya solo queda esperanza y silencio, pensando de cierto que
fue un suspiro.
Estar a tu lado me ha hecho feliz y guardo en mi recuerdo
con gran valía, qué, Caminé por mi
pueblo, de la mano del maestro en celestial compañía.
No temeré ahora al ser mandado a tocar campanas y
anunciar por las calles de mi pueblo.
En gloriosos repiques de gloria que tú cuaresma ha
llegado.
Así, de esta manera te rezo y queda éste cartel
presentado.