LEYENDAS
(01). EL CRISTO DE LA AGONÍA O SEÑOR DE MAYO
(SANTIAGO DE CHILE, CHILE)
Padul Cofrade
Investigación. Leyendas
Padul, 19 de abril de 2020
Hoy nueva entrega de la recopilación hecha por Padul
Cofrade de algunos de los muchísimos relatos y leyendas
relacionados con las imágenes de Cristo. Intentamos
con esto ayudar a pasar las horas de confinamiento a las
que nos vemos obligados y de paso conocer distintos aspectos
relacionados con la religiosidad en distintas zonas del
mundo.
Comenzamos con una leyenda poco conocida, la leyenda del
Cristo de la Agonía o Señor de Mayo.
El
Cristo de Mayo, la única imagen que no resultó
dañada durante un
gran terremoto en Siglo XVII en Chile
El
Cristo de Mayo o Señor de la Agonía
es una imagen policromada en madera del año
1612 y que se encuentra en la Iglesia San Agustín
en Santiago de Chile. ¿Qué tiene de
especial este Cristo que podría ser uno más
de los tantos que llegaron con los españoles?
La noche del 13 de mayo de 1647 un terremoto azotó
la ciudad y grandes rocas cayeron desde el Cerro
Santa Lucía, ubicado en el centro del Santiago
colonial, derrumbando casi la totalidad de las construcciones
y quedando en pie la Iglesia San Francisco y parte
de la Iglesia de San Agustín.
La historia cuenta que los frailes agustinos comenzaron
a revisar los daños en su Iglesia, y es en
ese momento cuando se dan cuenta que el Cristo se
encontraba en perfectas condiciones al igual que
las antorchas que lo iluminaban durante el día
y la noche. Sin embargo, la nave de la iglesia donde
se ubicaba la imagen se encontraba totalmente en
el suelo.
Pero
lo anterior no era lo más asombroso, la corona
de espinas del Señor de la Agonía,
que siempre se había ajustado a la cabeza
de la imagen, se encontraba en el cuello del Cristo.
Los frailes la tomaron para volver a ponerla en
su lugar y en ese momento volvió a temblar
con fuerza, una vez terminado el movimiento telúrico,
el obispo agustino Gaspar de Villarroel y los otros
frailes que se encontraban en el lugar volvieron
a repetir la operación de volver a colocar
la corona en su lugar, pero no pasaba por el cuello,
lo intentaron con más fuerza y nuevamente
volvió a temblar. El obispo decide no seguir
intentándolo por temor a que se produzcan
nuevos temblores.
Acercamiento
a la escultura del Cristo
de Mayo, en su cuello se puede
observar su corona caída.
Con los primeros rayos de sol del 14 de mayo, Santiago
vivía un ambiente de reconciliación y de
júbilo. Según relatan algunas crónicas
de la época se celebraron más de doscientos
matrimonios de parejas que hasta entonces eran convivientes;
y los presos de la cárcel no escaparon a pesar
de que habían desaparecido los guardianes y todos
los muros. Ante estos hechos el obispo de Villarroel organizó
una procesión para que la milagrosa imagen circulara
por la ciudad totalmente destruida.
Cabe destacar que el Señor de la Agonía
fue la única imagen que no resultó dañada
durante el terremoto, hecho que fue considerado como un
milagro y es por eso que nace la tradición del
Cristo de Mayo, Señor de la Agonía y después
del terremoto también es conocido como “el
señor de los temblores”.
En la actualidad la imagen se encuentra en la Iglesia
de San Agustín, se le atribuyen varios milagros
desde la mejoría de enfermedades hasta encontrar
trabajo, en donde se puede ver que la corona de espinas
continúa en el cuello del Cristo al igual que en
1647.