ASÍ SE CELEBRA LA FESTIVIDAD
DE SAN
SEBASTIÁN EN: PADUL (GRANADA)
Padul Cofrade
Desde 2003 hasta ahora
Hogueras,
cánticos y disparos al aire en honor de San
Sebastián
Aunque
el patrocinio de San Sebastián sobre Padul se
declaró oficialmente por bula de S.S. Pío
IX de 6 de mayo de 1852, la fiesta, el día 20
de enero viene celebrándose, prácticamente,
desde los tiempos de la Reconquista, auspiciada por
D. Juan de Austria y constituye, sin duda alguna, la
fiesta típica del Padul, por encima de otras
conmemoraciones importantes, y a la que ningún
Paduleño es ajeno, esté donde esté.
La
tradición de prender hogueras al paso del Santo
se remonta al año 1569 cuando los paduleños
celebraron en los patios de la Casa Palacio de los
Condes de Padul, conocida como "La Casa Grande",
la institución de San Sebastián como
patrón de Padul por parte de Don Juan de Austria.
La
imagen del Santo se venera en la Ermita que, en otros
tiempos, estaba en las afueras y que hoy es parte del
conjunto urbano. La costumbre es que el día
19 por la noche, la imagen sea trasladada en procesión
hasta el templo parroquial, traslado que hasta hace
muy poco tiempo se hacia exclusivamente a hombros de
soldados uniformados que ese año estuvieran
haciendo "la mili" o que la hubiera hecho
el año anterior, por aquello de ser SaN Sebastián
Capitán de legiones romanas.
Ese
día 19, todos los habitantes del pueblo, grandes
y chicos, salen a los montes vecinos a hacer un haz
de leña, para la hoguera de la procesión.
Desde muy temprano, las caminos se llenan de gentes
que, entonando canciones, se despliegan por el Manar,
por los caminos de la Venta y por los cerros de los
Molinos. Se organizan pandillas de amigos o familias
enteras que acampan en sitios agradables y allí comen
y pasan el día, con su haz bien atado. Luego,
por la tarde, los caminos son un reguero de gentes
que van depositando en el pueblo la leña, en
los lugares por donde ha de discurrir la procesión.
Ese día acuden su pueblo paduleños de
los más variados sitos, algunos de lugares lejanos,
y es costumbre, mantenida, la de llevar pequeños
haces, apenas algunos tornillos, por cada uno de los
ausentes.
Llegadas
las nueve de la noche, el repique jubiloso de la campana
de la ermita anuncia la salida del Santo, y es, en
ese momento justo, cuando se prende fuego a las inmensas
hogueras, que a veces dificultan el paso de la procesión.
Apenas ha hecho su aparición el Santo, cuando
las voces de todos los asistentes, vecinos y forasteros,
entonan el himno a San Sebastián mientras, desde
los balcones y terrazas de las casas vecinas, se llena
el aire con el sonido de los disparos de escopetas,
pistolas, revólveres, que acompañará al
Santo hasta su entrada en la Parroquia.
La llegada a la Parroquia es verdaderamente conmovedora,
pues siendo la iglesia de Padul, posiblemente, la segunda
más espaciosa de la Diócesis,
se llena totalmente y aún queda muchísima gente en la calle.
Y
allí, por segunda vez, miles de personas cantan
el famoso Himno de S. Sebastián, que allí todo
el mundo sabe y canta.
La
procesión solemne por el pueblo se celebra el
día 20, con el mismo acompañamiento de
hogueras y disparos.
Himno
de San Sebastián (Padul
- Granada):
Como
Soldados de Cristo
lucharemos por la paz
y tu serás nuestro Jefe
glorioso San Sebastián
En
tu martirio hay ejemplo
de fe valor y humildad.
En Padul los corazones
en tus filas morirán,
en tus filas morirán.
No
quisiste gozar en la tierra
ni en festines del mundo brillar.
Dedicaste tu vida de apóstol,
mostrando al mundo la luz del altar.
De
esta última línea he encontrado
dos versiones, una
la que figura aquí y la otra "mostrando
al hereje la luz del altar"
Si
la hoguera de amor de tu pecho
en el mío consigue abrasar,
al martirio yo iría satisfecho
y contigo de Dios a gozar,
y contigo de Dios a gozar.
Letra: Joaquín
Diego Martín Música: Antonio
García