CUANDO EL SENTIMIENTO COFRADE
SE HACE VERSO Y PROSA
David Domínguez Muñoz:
Paciencia de pasión
Yo
quisiera una vez más
admirarte y contemplar
y observar una vez
más
esa tu pasión,
muerte y resurrección.
Y yo señor;
ya no sé cómo
seguir
caminando junto a ti.
Cristo mío
ayúdame
a seguir esos tus
pies.
Tú ya me enseñaste
a caminar,
en el sendero de
la felicidad.
Desde pequeño
te preocupaste por
mí
y me dijiste que
saliera junto a ti
en la procesión
de El Padul
puesto que es donde
vivo yo.
Primero, de penitente,
como parte de la
gente,
que te quiere acompañar;
más tarde
de monaguillo,
portando un cirial.
Después,
que será,
llevarte a hombros
hasta tu casa de
Hermandad.
Y al final, dirigiendo
a los valientes costaleros
que te quieren portar,
no, a tu vera; mi
final.