Un diente de ajo, pelado.
Un huevo crudo, cascado.
Dos cucharadas de vinagre bueno.
Un decilitro de aceite fino de oliva.
Una cucharadita de sal.
Dos tomates grandes, en cachos.
Medio o un pepino pelado, en medias rodajas.
Cinco o seis vasos de agua fría.
Un cantero de pan asentado, troceado a pellizcos.
Elaboración:
En un cuenco de barro vidriado se ponen el tomate y el pepino. En la batidora,
el ajo, el huevo, la sal, el vinagre y el aceite. Se bate bien, se vuelca
en el cuenco, se mezcla y se deja reposar unos minutos. Se añade
el agua y se agita hasta diluir lo batido perfectamente; se introduce el
pan y se deja esponjar. Se sirve bien frío.
Se suele acompañar de morcilla, frutas dulces del tiempo (peras, melón,
higos, brevas...), tortilla de patatas, etc. Es plato de tiempo caluroso, habitual
en La Serena.